Según una encuesta, los cuadernos “profundizaron la grieta” entre argentinos

La causa de los cuadernos que ocupa la escena pública desde hace casi un mes no limó asperezas entre argentinos, sino que lejos de eso, agudizó la famosa grieta.

Así lo revela una encuesta de D’Alessio Irol – Berensztein, donde, entre los datos detallan diferentes “reacciones” frente a los presuntos hechos de corrupción de los exfuncionarios.

También confirma que, tras la investigación, los votantes siguen fieles a Cambiemos o al FPV tal como antes de que esto suceda.

Reacción ante la corrupción

Ante la consulta sobre los hechos de corrupción, un 45% de los encuestados dijo sentir bronca, seguidos por un 44% que tienen “desconfianza en que esto sea un manejo político del gobierno”.

En tanto, en relación a la “desconfianza en que los funcionarios queden presos” un 38% se consideró a favor de esa opción, porcentaje del cual un 46 % corresponde a Cambiemos y sólo un 18% al FPV.

En cuanto a la “esperanza en que se terminen las coimas” el porcentaje solo alcanza al 28%, de los cuales un 42% son votantes de Cambiemos, y sólo un 13% del Frente Para la Victoria.

Otra de las consignas en las que se expone la grieta, es ante la duda si la ex presidenta debería o no ir presa.  Un 91% de los encuestados de Cambiemos consideran que sí, mientras que sólo el 20% de los votantes del Frente Para la Victoria están de acuerdo. Entre ambos, un 56% cree que la ex mandataria debería estar tras las rejas.

¿Preferiría que termine la corrupción o que mejore la situación económica?, fue otra de las preguntas que marcó una amplia división. Un 80% de los votantes de Cambiemos preferirían que termine la corrupción, mientras que sólo un 19% de los votantes del FPV prefieren esa opción.

En tanto, el 75% de los votante del FPV consideran más importante que mejore la situación económica, cuando sólo el 19% cree que eso es más urgente.

Por último, respecto de las condenas y quiénes cumplirán con penas de prisión en la causa de los cuadernos, el 70% cree que sólo “algunos” de los involucrados en la causa serán condenados.

De ese 70% total, un 83% corresponde a votantes de Cambiemos, y un 56% a simpatizantes del FPV.

Publicado en IProfesional el 25/08/2018

Según una encuesta, los cuadernos “profundizaron la grieta” entre argentinos

Un informe de la encuestadora D’Alessio Irol – Berensztein muestra que incluso en las causas de corrupción los votantes mantienen sus posturas políticas. Los detalles.

A pocos días de que se cumpla un mes de conocerse la investigación por el escándalo de corrupción que desató la aparición de los cuadernos del chofer Oscar Centeno, una encuesta muestra que las posiciones políticas entre votantes de Cambiemos y votantes del FPV se mantienen “fieles” a la grieta, o incluso, se profundizan frente al avance de la causa.

Entre los datos relevados, se detallan varias “reacciones” frente a los presuntos hechos de corrupción de los exfuncionarios:

Reacción ante la corrupción. Ante la consulta, un 45% de los encuestados dijo sentir bronca, seguidos por un 44% que tienen “desconfianza en que esto sea un manejo político del gobierno”. Primera “grieta”: de ese porcentaje, un 79% son simpatizantes del FPV, y sólo un 13% lo son de Cambiemos.

En tanto, en relación a la “desconfianza en que los funcionarios queden presos” un 38% se consideró a favor de esa opción, porcentaje del cual un 46 % corresponde a Cambiemos y sólo un 18% al FPV.

Mauricio Macri: “La corrupción, nunca más en la historia de los argentinos”

En cuanto a la “esperanza en que se terminen las coimas” el porcentaje solo alcanza al 28%, de los cuales un 42% son votantes de Cambiemos, y sólo un 13% del Frente Para la Victoria.

Otra de las consignas en las que se expone la grieta, es ante la duda si la ex presidenta debería o no ir presa. Un 91% de los encuestados de Cambiemos consideran que sí, mientras que sólo el 20% de los votantes del Frente Para la Victoria están de acuerdo. Entre ambos, un 56% cree que la ex mandataria debería estar tras las rejas.

¿Preferiría que termine la corrupción o que mejore la situación económica?, fue otra de las preguntas que marcó una amplia división. Un 80% de los votantes de Cambiemos preferirían que termine la corrupción, mientras que sólo un 19% de los votantes del FPV prefieren esa opción.

En tanto, el 75% de los votante del FPV consideran más importante que mejore la situación económica, cuando sólo el 19% cree que eso es más urgente.

Por último, respecto de las condenas y quiénes cumplirán con penas de prisión en la causa de los cuadernos, el 70% cree que sólo “algunos” de los involucrados en la causa serán condenados.

De ese 70% total, un 83% corresponde a votantes de Cambiemos, y un 56% a simpatizantes del FPV.

Publicado en Perfil el 25/08/2018

Todo señala a Cristina como jefa de la banda

Cuando Cristina Kirchner dijo en el Senado que una homérica conspiración internacional trata de impedir su candidatura presidencial el año que viene, estaba diciendo algo más. Anunciaba que definitivamente será candidata presidencial. Avanzó en la monumental teoría conspirativa y se comparó con Lula, que es un candidato preso en Brasil. Será candidata, entonces. Pero ¿estará presa? Las pruebas acumuladas por el juez y los fiscales en la causa caratulada `Fernández Cristina Elisabet y otros sobre asociación ilícita` justificarían ya su prisión preventiva, sobre todo porque conserva espacios de poder como para obstruir la investigación.

La conspiración contra ella es un recurso trillado de los que no pueden explicar nada. O a Cristina le falta conocer muchas más cosas antes de denunciar mía persecución. Cristina no sabe todavía, por ejemplo, todo lo que dijo José López, el que fue su todoterreno secretario de Obras Públicas, quien ya habló hasta cansarse (y cansar) ante el fiscal Carlos Stornelli y el juez Claudio Bonadio. Cuando se conozca la devastadora denuncia que ese hombre fundamental del régimen kirchnerista hizo ante los magistrados, al Senado no le quedará ningún margen para negarle el desafuero y mandarla presa. La investigación judicial estableció que Néstor Kirchner ideó un sistema de sobornos con todos los negocios del Estado que funcionó desde 2005 hasta su muerte, en 2010. El era un hombre meticuloso que sabía el valor del dinero y que le dedicaba una pasión desenfrenada a conseguirlo y administrarlo. Cristina congeló el sistema durante dos años, desde 2010 hasta 2012, pero en este último año decidió reinstaurarlo usando las anotaciones de su marido en un cuaderno Arte (no Gloría, como se creía hasta ahora). No es contradictorio: construir semejante fortuna en tan poco tiempo no deja de ser un arte.

El sistema estuvo vigente con Cristina hasta que ella, dejó el poder, en diciembre de 2015. Aquel paréntesis de dos años construyó la imagen de una mujer que se había alejado (o no sabía nada) de los negocios espurios de su marido. Imagen que se instaló en la más destacada dirigencia política no kirchnerista. La realidad era otra. Ella hacía lo mismo que Néstor, pero de manera más desordenada y con menos conocimientos del mundo de los negocios. Empresarios y exempleados suyos han confesado ante la Justicia que Cristina estaba, permanentemente al tanto de los sobornos que sus funcionarios cobraban. Los investigadores judiciales se encontraron con una sorpresa: los porcentajes. Están llegando a la conclusión de ([lie los empresarios mintieron cuando hablaron de coimas del 5 por ciento. La Justicia cree que, en el caso del transporte, pagaron mi 30 por ciento de sobornos, otro 30 por ciento se lo quedaron los propios empresarios y mantuvieron el servicio con el 40 por ciento restante. Esta es la razón, por ejemplo, de que todo el servicio de ferrocarril haya sido un desastre durante el gobierno kirchnerista, no solo el Sarmiento, que terminó con la tragedia de Once.

Hubo otros accidentes en otras líneas que, por la hora o el día, no tuvieron la repercusión ni la cantidad de víctimas del choque de Once. Un sagaz funcionario judicial, que nada tiene que ver con esta investigación, decía el viernes: `En todos los países del mundo los arrepentidos dicen la verdad ante la Justicia. Este es el único país donde los arrepentidos mienten`. La conclusión es grave porque la ley del arrepentido se acaba de estrenar, y no sería un buen precedente que sirva para prolongar la impunidad. Aseguran que Bonadio y los fiscales Stornelli y Rívolo investigarán lo que dijo cada arrepentido para exponerlo luego ante el tribimal oral que en algún momento juzgará el caso. Lo que ellos digan será fundamental para que el tribunal atenúe o agrave las condenas.

Un caso paradigmático del arrepentido a medias es el del financista Ernesto Clarens, que se presentó por segunda vez ante los magistrados, pero no cambió su actitud. Retacea información, desliza nombres de otros culpables, se contradice, cambia las fechas. Nunca conformó ni al juez Bonadio ni al fiscal Stornelli. Su declaración no fue homologada todavía y difícilmente lo sea si no aporta más datos. Uno de los investigadores le preguntó si había contribuido a fugar los dólares de Daniel Muñoz, el exsecretario de Néstor Kirchner, que murió hace dos años. A Muñoz le encontraron propiedades por 65 millones de dólares en Miami. Clarens contó que una vez Muñoz le preguntó cómo hacer una, sociedad offshore para manejar dinero en el exterior, pero que no avanzó más allá de una pregunta vaga y nunca volvió sobre el tema. ¿Es creíble? Clarens aseguró que Aldo Ducler era el financista que sacaba dinero de Néstor Kirchner al exterior. La estrategia es perfecta: Ducler y Kirchner están muertos, y los muertos no hablan ni la ley penal rige para ellos. Hay quienes están seguros de que Clarens fue una pieza importante para fugar al exterior unos 1000 millones de dólares. Clarens calla y protege.

Los investigadores creen que el monto de dinero que circuló entre coimas y sobreprecios es muy alto, pero que también una parte de esa plata se quedó en los recovecos entre empresarios, exfuncionarios que se hicieron ricos y los gastos de la política. La Cámpora o Justicia Legítima, por caso, fueron señalados por testigos como beneficiarios del dinero mal habido. Ellos desmienten o culpan a la CIA (Larroque dixit). Pero ¿qué otra cosa pueden hacer? ¿Autoincriminarse, acaso? Cierta dispersión del dinero de la corrupción sucedió sobre todo cuando ya la jefa del sistema era Cristina, menos experta que su marido en el férreo control del dinero de la corrupción. Nadie se explica cómo la familia Kirchner no hizo, con semejante cantidad de dinero, una empresa de la envergadura de Techint o de Arcor. `Tenían los reflejos de los inmigrantes italianos o españoles de los años 20 o 30 del siglo pasado: efectivo o bienes inmuebles`, dice uno de los investigadores. Lázaro Báez, un testaferro del exmatrimonio presidencial, tiene 300 propiedades en el sur. Los investigadores también se sorprendieron por la tosquedad del método para robar. A Báez le dieron no menos de 35 obras en Santa Cruz. No hizo ninguna, pero se llevó toda la plata que costó cada una. El delito quedó al descubierto, demasiado vulnerable ante la primera investigación del latrocinio.

Regresemos a la primera pregunta. ¿Cristina irá presa? Depende de la decisión del Senado y este decidirá no por lo que dice ahora, sino por las pruebas que aporte el juez cuando procese a Cristina y, eventualmente, vuelva a pedir su desafuero para ponerla presa. El principio no escrito de que los senadores solo son desaforados cuando hay una sentencia definitiva es inconstitucional. El artículo 70 de la Constitución dice que cualquiera de las dos cámaras del Congreso deberá `examinar el mérito del sumario` en el caso de que un juez pida el desafuero. Con los dos tercios de los votos, la cámara podrá `ponerlo a disposición del juez para su juzgamiento`. Este matiz es importante. El juzgamiento es anterior a la sentencia definitiva. Cuando existe una sentencia definitiva es porque el juzgamiento ya sucedió. Por lo tanto, Cristina está en condiciones de ser desaforada para ir a prisión si Bonadio lo pidiera por segunda vez. Ya pidió el desafuero y su prisión en el tramo inicial de la investigación de los cuadernos. La sociedad está escéptica y desconfiada con esta causa. Una mayoría no cree que todos los acusados terminen presos y todavía un 30 por ciento de los consultados confía en la honestidad de Cristina,. Coincide con el porcentaje de su imagen positiva.

 Con todo, llama la atención la respuesta a una pregunta de la consultora D’Alessio/Berensztein. Le preguntaron a la gente si prefería que termine la corrupción o que mejore la situación económica. Un 51 por ciento contestó que era mejor terminar con la corrupción y un 46 por ciento respondió que prefería que mejorara la situación económica. Eso ya no es una grieta ideológica ni política. Es una crisis de valores expuesta casi obscenamente. Es una parte significativa de la sociedad que explica por qué se pudo robar tanto durante tanto tiempo.

Publicado en La Nación el 26/08/2018

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Corrupción o economía: Dime qué te preocupa más y te diré a quién votaste

Un sondeo revela las reacciones opuestas entre los electores de Cambiemos y los del kirchnerismo ante los hechos de corrupción. 

Una reciente encuesta revela las impresiones de los votantes de Unidad Ciudadana y de Cambiemos con respecto a la causa de corrupción que destaparon los cuadernos de Oscar Centeno, el chofer de Roberto Baratta, la mano derecha del ex ministro de Planificación Federal, Julio De Vido. Las primeras conclusiones marcan que se profundiza la grieta entre quienes votaron al kirchnerismo y al macrismo.

El informe perteneciente al Monitor de Humor Social y Político, que D’Alessio IROL efectúa en forma continua junto a Berensztein, corresponde a una medición realizada en forma online durante el 22 y 23 de agosto de este año, con 800 encuestados mayores de 18 años, de todo el país.

Ante la consulta por la reacción ante lo hechos de corrupción, la mayoría de los votantes de Cambiemos, expresa “bronca” y en segundo lugar, “desconfianza en que los funcionarios queden presos”.

Al compararlo con las respuestas de los electores del Frente Para la Victoria (o Unidad Ciudadana) se profundiza la grieta. La mayoría señaló que la reacción es de “desconfianza en que esto sea un manejo político del gobierno”. Y detrás, la segunda opción fue la “desconfianza en que los empresarios queden presos”.

Además, la opción menos elegida entre los kirchnerista dentro de la encuesta fue la “esperanza en que se terminen las coimas”, y en el mismo número, los votantes de Cambiemos señalaron en menor medida como respuesta una “desconfianza en que esto sea un manejo político del gobierno”.

En la encuesta también consultaron si “preferiría que termine la corrupción o mejore la situación económica”, y en las respuestas también se ve la grieta. Un 80% de los votantes de Cambiemos eligió el “fin de la corrupción” y un 19% que “mejore la situación económica”. A la inversa, un 75% de los electores del kirchnerismo optó por el repunte de la economía y un 19% por el fin de la corrupción.  Y al sacar los totales, el 51% optó por el fin de la corrupción y un 46% por la mejora en la economía.

Otra de las consultas fue sobre si la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner debería estar presa. En julio de 2016, luego de que aparecieran los bolsos de José López con 9 millones de dólares en un convento de General Rodríguez, una mayoría de los votantes de Cambiemos pensaba que debía ser detenida, pero cinco meses después el número creció a 91%, los mismos valores que tiene hoy.

Por otro lado, entre los votantes del FPV, el número que cree que debería estar presa hoy es aún más bajo (20%) que el de julio de 2016 (30%), tras la aparición de los bolsos de José López.

Ante la consulta sobre si en la causa de los cuadernos habrá condenados, el 83% de los votantes de Cambiemos considera que lo serán “algunos”, un 9% “nadie” y un 7% “todos”.

Entre los electores kirchneristas, el 56% cree que algunos serán condenados, un 34% que nadie y sólo un 5% que todos. Al computar los totales, el 70% supone que sólo recibirán pena algunos, mientras que el 22% cree que ninguno será condenado.

Publicado Clarín el 25/08/2018

Registran un aumento del enojo con la política

Indiferencia, desilusión, preocupación y un enojo que crece. La crisis económica y las revelaciones de los cuadernos de las coimas no corren solamente por vías paralelas, a uno y otro lado de la grieta entre Cambiemos y el kirchnerismo, justificándola y ensanchándola. Su impacto parece estar combinándose para un sector mayoritario de la sociedad. El resultado, un cuestionamiento social que avanza sobre los políticos y la política en general.

El escenario se asoma en la mayoría de las encuestas del último período y fue señalado a LA NACION en sus diversos matices por encuestadores y analistas. La bronca y el “que se vayan todos” de 2001 están lejos, lejísimos, de cualquier pronóstico, coinciden todos. Pero hay un malestar con la dirigencia que aumenta.

“La crisis económica viene generando un clima de preocupación, que puede traducirse en malhumor o pesimismo. Por el sueldo, por el empleo. Si bien los cuadernos apuntan al kirchnerismo, terminan impactando en todo el sistema político”, dice Mariel Fornoni, de Managment & Fit. “Ningún dirigente crece y todos caen. El 50% que está en el medio en algún momento definirá su prioridad entre corrupción o economía , o elegirá una tercera opción que hoy parece muy difícil que surja”, agrega.

Lo único que subió fue el descontento general con la política. La imagen de todos los políticos está baja. Hay más de un 30% de la gente que dice: ‘No me gusta ningún político’.

Alejandro Catterberg – Poliarquía

Para Alejandro Catterberg, el aumento del descontento comenzó a percibirse con los disturbios de diciembre. “A esa violencia orquestada le siguió la caída de popularidad del Gobierno por tarifas y la corrida. Pero no vemos que nadie crezca: lo único que subió fue el descontento general con la política”.

“Hay más de un 30% de la gente que dice: ‘No me gusta ningún político'”, continúa el director de Poliarquía.

Esta semana, Opinaia culminó una encuesta en la que más del 70% acordó con la frase de que todos los políticos son corruptos y no se puede confiar en la política. “Existen una apatía y un descrédito amplio hacia la política, pero nadie puede capitalizarlo”, sostiene Valentín Nabel, uno de los pocos en registrar “grietas” en los núcleos duros, pero más que nada en el kirchnerismo, por los cuadernos.

Cristina no se movió un punto. Pese a la economía, los dirigentes de Cambiemos siguen liderando las encuestas. Lo que hay es decepción, tristeza

Eduardo D’Alessio, de D’Alessio IROL-Berensztein, disiente en este punto: “No se perforan los núcleos duros de Cambiemos y de Cristina porque nadie capitaliza. Dos semanas de fuego graneado con los cuadernos en los medios y Cristina no se movió un punto. Pese a la economía, por otro lado, los dirigentes de Cambiemos siguen liderando las encuestas. Lo que hay es decepción, tristeza”.

Para Ricardo Rouvier, de la mano del descontento se consolida la polarización. “Una punta del 30% dice que los cuadernos son mentira y pone el foco en la economía. La otra punta dice lo contrario. En el medio hay un 40% que tiene los dos temas girando en la cabeza”.

Raúl Timerman, de Grupo de Opinión Pública, también pone el foco en “un 45% que pide por una alternativa, pero no la encuentra”.

La crisis económica viene generando un clima de preocupación. Si bien los cuadernos apuntan al kirchnerismo, terminan impactando en todo el sistema político

Mariel Fornoni – Management & Fit

“Lo más probable es que crezca el enojo con la política: esa bronca hoy está en todos lados, incluso en los núcleos duros de Cambiemos y el kirchnerismo”, dice Hugo Haime.

Analía del Franco registró el fenómeno en su última medición en la provincia de Buenos Aires: “Desde hace meses, la situación económica erosiona la confianza en la gestión del Gobierno. Ahora, con los cuadernos, pasa con Cristina: la incertidumbre se vuelve doble. El año que viene, la definición pasará por economía o corrupción, pero me inclino a pensar que la economía va a ser más determinante”.

Publicado en La Nación el 27/08/2018

En el Día del Niño, ONG´s reclamaron once medidas urgentes para la defensa de los derechos de la infancia

Organizaciones que conforman la coalición Infancia en Deuda elaboraron una agenda de políticas y pidieron al Estado que se “comprometa” con el cumplimiento de estos objetivos.

En el marco del Día del Niño, las organizaciones que forman parte de la coalición Infancia en Deuda elaboraron una agenda de medidas urgentes para la infancia y la adolescencia.A través de un documento, las ONG´s pidieron al Estado que se “comprometa” en el cumplimiento de estos objetivos para” reducir la inequidad en el ejercicio de los derechos de niños y niñas”.

Los once puntos de la “agenda de medidas urgentes para la infancia y adolescencia“:

  •  Asegurar vacantes escolares para todos los niños y todas las niñas

 Este año, más de 10.000 niñas y niños de la Ciudad de Buenos Aires quedaron en lista de espera por falta de vacantes en las escuelas de nivel inicial de gestión estatal. A nivel nacional, según el informe publicado por el Barómetro de la Deuda Social de la Infancia (UCA), el 26,8% de las niñas y niños de entre 3 y 5 años no asisten al nivel inicial. En el Día del Niño pedimos a los ministerios de Educación nacional y de cada jurisdicción que aseguren vacantes para que ningún niño o ninguna niña quede por fuera del sistema educativo.

  • Asegurar la aplicación efectiva y equitativa de la Educación Sexual Integral

 Los y las niñas y adolescentes tienen derecho a recibir una correcta Educación Sexual Integral. La ley 26.150, aprobada en el año 2006, establece que todos los niños, niñas y jóvenes que asisten a escuelas públicas y privadas del país tienen derecho a recibir educación sexual integral, articulando “aspectos biológicos, psicológicos, sociales, afectivos y éticos”. Sin embargo, desde su sanción, la ley no se aplica correctamente en todas las provincias ni en todas las escuelas. Según sondeos de la consultora D’Alessio IROL difundidos en marzo pasado, solo 2 de cada 10 alumnos argentinos reciben hoy en el aula educación sexual de manera habitual. Además, una encuesta sobre la aplicación de la ESI porteña elaborada por Libres del Sur, Mumalá e Isepci en 2016 indicó que el 31% de los alumnos no tuvo ningún tipo de educación sexual. Entre quienes sí accedieron, el 95% refirió que solo se habló de enfermedades de transmisión sexual y el aparato reproductor, dejando de lado temas clave como igualdad entre varones y mujeres, diversidad sexual, violencia contra las mujeres y formas de prevenir acoso, temas incluidos en la ESI. Reclamamos que el Estado nacional y los estados provinciales aseguren la aplicación efectiva y equitativa de la Educación Sexual Integral para niñas, niños y adolescentes.

  • Realizar en forma urgente la Encuesta Nacional de Nutrición y garantizar la implementación de una política nutricional adecuada

La última Encuesta Nacional de Nutrición y Salud se llevó a cabo en 2005: en ese momento, el bajo peso y la desnutrición crónica aparecían como las principales deficiencias nutricionales a nivel nacional, mientras que la obesidad se presentaba como problemática en ascenso. Actualmente, solo el 35% de los niños argentinos tiene garantizada la alimentación, según el último informe del Barómetro de la Deuda Social de la Infancia de la Universidad Católica Argentina (UCA). En tanto, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO), 1 de cada 10 niños menores de 5 años padecen obesidad infantil en la Argentina. El Estado deberá impulsar en forma urgente la realización de una encuesta nacional nutricional e implementar una política nutricional adecuada a esos resultados.

  • Diagnosticar oportunamente el Chagas y brindar seguimiento a los casos positivos

Cada año, más de 1.300 niñas y niños en todo el país nacen con Chagas congénito y sólo el 50% son diagnosticadas/os. El estudio para detectar el Chagas es obligatorio en embarazadas, pero no siempre se cumple ni se continúa con el tratamiento. Esto ocasiona la falta de diagnóstico, seguimiento y control de más de 600 niñas y niños que nacen con la infección y la pérdida de oportunidades fundamentales para brindar un tratamiento adecuado que podría permitir la cura. Exigimos que el Estado cumpla con su obligación de diagnosticar oportunamente esta infección y brinde adecuado seguimiento a los casos que resulten positivos. No es un regalo, es un derecho.

  • Extender y profundizar políticas de fortalecimiento familiar

Niñas, niños y adolescentes tienen derecho a vivir en familia: el Estado debe garantizar ese derecho a partir de políticas de fortalecimiento familiar que contribuyan a que NNyA puedan crecer y desarrollarse bajo el cuidado de sus familias desde una perspectiva de protección y resguardo. Las pocas experiencias que hay en algunas jurisdicciones no cuentan con el alcance e impacto que deberían tener para abordar problemáticas familiares complejas que requieren de un acompañamiento específico para prevenir la pérdida del cuidado familiar. Separar a un niño/a de su familia debe ser siempre la medida de último recurso, luego de agotar todas las estrategias de intervención posibles. Es necesario avanzar en este sentido para cumplir con la Ley de Protección Integral de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.

  • Definir y monitorear estándares de calidad para hogares y residencias

En la Argentina, el 57% de niñas, niños y adolescentes sin cuidados parentales residen en dispositivos formales de cuidado que son gestionados de forma privada (organizaciones no gubernamentales), mientras que el 43% reside en dispositivos gestionados por los gobiernos provinciales. A pesar del marco normativo vigente, con enfoque en Derechos Humanos, todavía hay gran desigualdad en la calidad de cuidado brindado por cada uno de los dispositivos y en las diferentes jurisdicciones. Esto impacta fuertemente en la preparación (o la falta de preparación) para el egreso de los adolescentes y jóvenes sin cuidados parentales. Es urgente que el Estado Nacional se involucre en la definición de estándares de calidad para el cuidado en los dispositivos formales de cuidado y que participe activamente en su supervisión y monitoreo en cada una de las jurisdicciones, para poder definir prioridades de mejora de las acciones de cuidado integral.

  •  Implementar el programa de acompañamiento a jóvenes sin cuidados parentales

En la Argentina hay más de 10.000 niñas, niños y adolescentes que han sido separados de sus familias por situaciones de violencia o maltrato y viven sin cuidados parentales en distintos dispositivos de cuidado formal, como los hogares convivenciales o residencias. Muchos de ellos egresan a los 18 años de la vida institucional sin ningún tipo de acompañamiento para la vida independiente. Hace más de un año, gracias a la presión de organizaciones de la sociedad civil y de los jóvenes organizados, se sancionó la ley 27.364, que crea el Programa nacional de acompañamiento para el egreso de jóvenes sin cuidados parentales. Necesitamos que el Poder Ejecutivo nacional reglamente YA la ley de Egreso, para que se implemente este programa que brinda a cada joven egresado un referente para el acompañamiento y una asignación económica en cada una de las 24 jurisdicciones del país.

  • Desarrollar una política integral para superar la exclusión estructural

En el año 2017, el primer censo popular de personas en situación de calle en la Ciudad de Buenos Aires arrojó cifras alarmantes: casi 600 niñas y niños viven en las calles porteñas. Para este Día del Niño reclamamos al Gobierno de la Ciudad el desarrollo de una política integral para superar las situaciones de exclusión estructural en que viven las niñas y niños y sus familias, con el debido respeto por el enfoque de los derechos del niño y su interés superior.

  • Impulsar acciones que aseguren la universalidad y equidad del régimen de transferencias para la infancia y la adolescencia

Un esquema de transferencias para las familias con niños/as debería ser universal para garantizar los derechos de niñas y niñas y erradicar la pobreza infantil. Sin embargo, se estima que alrededor de un millón y medio de niñas, niños y adolescentes de familias vulnerables aún no se encuentran cubiertos por este esquema de transferencias. Además, mientras que a los niños reciben AUH se les exige que corroboren la asistencia escolar, este requisito no opera para los niños que reciben AFH o cuyos padres deducen ganancias. Se sugiere la eliminación de las corresponsabilidades. Para promover una mayor equidad proponemos eliminar el límite de ingreso mínimo para el cobro de asignaciones familiares establecido por decreto, la exclusión de los niños hijos de inmigrantes que posean menos de tres años de residencia en el país y el límite de cinco hijos para el caso de los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo. Además, habría que crear un esquema especial de asignaciones para los niños sin cuidados parentales. Recordamos que un escenario inequitativo en las transferencias a la niñez contribuye inevitablemente a la infantilización de la pobreza.

  • Asegurar la intangibilidad de los fondos destinados a la infancia y la adolescencia

La infancia es la población más empobrecida del país: casi la mitad de los niños argentinos son pobres, según el último informe del Barómetro de Deuda Social de la Infancia de la Universidad Católica Argentina (UCA), que confirmó en junio el dato de 48,1% de los chicos en situación de pobreza. La ley 26.061 de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes establece que el Estado realizará siempre inversiones crecientes, y dispone “la intangibilidad de los fondos destinados a la infancia, adolescencia y familia establecidos en el presupuesto nacional”. Recientemente, el Comité de los Derechos del Niño de la ONU manifestó su preocupación a la delegación argentina que se presentó en Suiza en el marco de la 78º Sesión del Comité, “por la posible situación económica en la que se pueda ver inmerso el Estado a raíz de los posibles ajustes que corresponda hacer, conforme a las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional”, respecto de las políticas sociales destinadas a niñas, niños y adolescentes. Pedimos al Estado que se abstenga de ejecutar medidas de ajuste en la población más vulnerable de nuestro país en lugar de apuntar a mejorar sus condiciones.

  • Designar al Defensor del Niño

 El cargo de Defensor/a de Niñas, Niños y Adolescentes de la Nación está vacante desde su creación, hace 13 años, y corresponde al Congreso Nacional su selección y designación. El Defensor del Niño debe monitorear las políticas públicas para la protección integral de la infancia y velar por el cumplimiento de los derechos que el Estado tiene que garantizar a niñas, niños y adolescentes: a la vida, a una buena calidad de vida, a la dignidad e integridad física, psíquica, sexual, a la seguridad social, a la atención integral de la salud, entre otros. En 2017, tras una sentencia judicial originada en una presentación realizada por INFANCIA EN DEUDA y otras organizaciones sociales, se conformó la Comisión Bicameral del Congreso que abrió la convocatoria para elegir al Defensor del Niño por concurso público de oposición y antecedentes: se admitieron 68 postulantes. Reclamamos que su nombramiento se concrete a la brevedad mediante un procedimiento público, transparente, con indicadores objetivos, y con instancias de participación y control por parte de la ciudadanía y la sociedad civil.

Publicado en Ámbito el 19/08/2018

Las razones del apoyo a Cristina

En los últimos días se conocieron dos encuestas realizadas tras el destape del Cuadernogate. En la de Synopsis, el dato significativo es que la imagen de Cristina no se vio afectada por el escándalo de corrupción. Con 31,4% de imagen positiva, superó el 30,9% de agosto del año pasado.

El otro sondeo es de D´Alessio/Berensztein. El dato llamativo es que, cuando se pregunta si quien organizó las coimas era la ex presidenta, el 25% de los propios votantes kirchneristas responde que sí. Y a la pregunta de si ella debería ir presa, es el 20% del voto K el que también dice que sí.

Por su lado, los sondeos del Gobierno confirman que los cuadernos de Centeno no hicieron mella en su intención de voto, que sitúan en torno al 25%. Devoción cristinista. La pregunta que surge es por qué, pese a tantas evidencias, hay un núcleo duro y relevante de personas que siguen creyendo en Cristina. Las respuestas van más allá de ella, pero no de lo que ella significa.

El peronismo, como el radicalismo, el comunismo o el socialismo, son partidos típicos de la modernidad. Cada uno con su perfil ideológico, representan creencias fuertes (como las religiones) y a sectores sociales bastante bien definidos, como pobres venerando a Perón o sectores medios a Alfonsín.

El kirchnerismo es la primera gran expresión argentina de la hipermodernidad. Vino con el ADN peronista de la modernidad, pero se formó en la posmodernidad noventista. Lo que resultó fue una épica pragmática, que conserva las formas y los símbolos del relato modernista (líder, Patria, antiimperialismo), pero cruzado con el escepticismo y el hedonismo posmo. Retoma aquello de `primero la Patria, después el movimiento y por último los hombres`, pero sabiendo que el sacrificio humano dejó de ser gratuito.

Cristina no es una líder del modernismo como Perón, ni del posmodernismo como Menem. Representa a un sector hipermoderno que tamiza las creencias absolutas de los 70 con el individualismo de los 90. Están insatisfechos con una fiesta global posmoderna que no resultó como se esperaba.

Los beneficios no derramaron para todos, se añoran las identidades nacionales y aparecen nuevas amenazas a la seguridad individual y colectiva. La historia no finalizó y el futuro es incierto. La tecnología complejizó la vida y puso en jaque al trabajo. Las comunicaciones y las redes sociales atraviesan a todos los sectores y vuelven más difusos sus límites.

La hipermodernidad navega en esa revolución de las alianzas sociales y políticas tradicionales y convive, como en ninguna otra era antes, con dos nuevas clases sociales que ni el capitalismo ni el marxismo tuvieron en cuenta. La clase estatal. En la Argentina del último medio siglo siempre fue importante el sector de trabajadores vinculados con el Estado nacional, provincial y municipal. Pero sus cantidades y proporciones son cada vez mayores. En los 70 sumaban 1.300.000 personas (5,8% de la población). Hoy la cifra del total de empleados públicos varía según quién la audite, pero para la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP) rondaría los 3.900.000. Un 8,8% de la población. Según datos oficiales, en algunas provincias (Corrientes, Chaco, Santiago del Estero, Jujuy, La Rioja, Catamarcay Formosa), la mayoría de su población trabaja para el Estado.

La estatal es una clase que se caracteriza por su dependencia de un empleador político. Por eso los cambios de signo en las administraciones estatales suelen ser resistidos por el temor a perder el vínculo laboral. En términos electorales significa que los votos de la clase estatal suelen ser conservadores del statu quo vigente, cualquiera sea.

La otra característica de esta clase es que en su interior conviven sectores económicos muy distintos, empleados de $ 20 mil con funcionarios que ganan diez veces más, sin contar lo que pueden sumar de forma ilícita. Por eso en los pasillos de los ministerios se mezclan empleados que viven en villas con otros que habitan mansiones.

El kirchnerismo se nutre de esta clase estatal que históricamente estuvo cerca de quien más la hizo crecer, el peronismo. Pero con los gobiernos de Néstor y Cristina esa planta se duplicó. Son millones de votos fieles con quienes les dieron un trabajo en blanco para toda la vida y temerosos de quienes amenazan con reducir su plantel. La clase marginal. Es un sector que comenzó a ser estudiado con cierta seriedad en los 60, a la par del surgimiento de barrios precarios en torno a los grandes centros urbanos. Hasta entonces, al marginal o `lumpen` se lo relacionaba con personas con problemas mentales o simples delincuentes.

Pero el crecimiento exponencial de asentamientos precarios, miseria, diferencias económicas, una sociedad de consumo tentadora y lejana, más un narcotráfico que se presenta como solución y evasión, fueron el motor de este nuevo sector social.

Desde lo cuantitativo y político, el marginal ya no es marginal. Es una serie exitosa producida en la Argentina y replicada por Netflix.

No hay una medida cierta de qué porcentaje de población representa. Hay estudios que lo sitúan en un 19%, pero en general se mezcla al marginal con el indigente. Y no necesariamente son lo mismo. El marginal quebró todos sus lazos sociales de convivencia.

Políticamente, son personas que pueden funcionar como mano de obra barata de los punteros. Para tareas que van desde ir a actos públicos a acciones delictivas. El combo de violenciadroga-dinero-política es el caldo de cultivo de un sector que tiene poco para perder.

El kirchnerismo abreva en esta marginalidad organizada por punteros que creció y convivió durante doce años con sus gobiernos. No es un sector al que las coimas o los aprietes le generen conflictos éticos.

Pero no son los únicos votos que conforman ese alto porcentaje de adherentes indemnes a cualquier denuncia contra Cristina. Clases bajas y medias. Entre ellas están los que comprueban en sus bolsillos que con ella estaban mejor. Son pragmáticos. Integran el porcentaje que en las encuestas responde que los Kirchner son corruptos, pero que igual votarían a Cristina. No creen que la corrupción sea buena, pero les parece peor no poder vivir dignamente.

Y están los sectores medios, mediosaltos (profesionales, comerciantes, intelectuales) que la siguen apoyando por dos motivos. La mayoría, según un sondeo aún no difundido de una de las consultoras más prestigiosas, lo hace porque no cree en las denuncias. Dicen que es una patraña armada por macristas, jueces y medios.

A estos se les agregan quienes aceptan la corrupción como un mal necesario de un país que no tiene blanqueado su sistema de financiamiento partidario. Y los que piensan que fue Néstor el responsable, no Cristina.

Todos esos sectores que integran el tercio de población que volvería a votarla sin prestar atención a las denuncias de corrupción tienen historias y motivaciones distintas a una mayoría que la repudia. Representan ese `otro` al que la grieta impide reconocer su existencia y razones. Pero son producto, ellos y los demás, del mismo país y de los mismos fracasos.

Entre quienes la apoyan, pese a todo, aparecen dos nuevas clases: la estatal y la marginal También están los que antes vivían mejor y los que no creen en las denuncias.

El 25% del voto K cree que ella es corrupta. Un 20%, que debería ir presa.

Publicado en Perfil el 19/08/2018

Semana negra de CFK: Asedio judicial

Cristina enfrenta su causa más pesada. El operativo `fue Néstor` y la noche que pasó junto a su hija. ¿Acercamiento con el Papa?

Los que la vieron dicen que ella está bien. Entera, tranquila. Que esta es una batalla más de una guerra que empezó en el momento en que dejó el poder. `Lamentablemente está acostumbrada`. Aseguran que el escándalo que destapó el chofer Oscar Centeno ni siquiera alteró su rutina, salvo por la noche del lunes, el día en que fue a declarar ante el juez Claudio Bonadio, y luego durmió en la casa de su hija Florencia en Constitución para evitar los flashes, y un viaje al Sur que tenía programado y que tuvo que cancelar.

Sin embargo, hay una novedad interesante, que en el pasado se había asomado pero ahora toma forma y vuelo en el entorno de Cristina Kirchner: el operativo `fue Néstor`. Ni los muertos descansan en paz en la Argentina encuadernada.

El 2018 fue un año movido para el país y también para la líder de la oposición. De perder en las elecciones con un ignoto Esteban Bullrich a un entusiasmo con la caída de la imagen de Macri y de los suyos que perdura, a pesar de las esquirlas del Chofergate. `En nuestras encuestas no bajamos del 35% de intención de voto, este show mediático y judicial apenas nos rayó una puerta`, aseguran desde La Cámpora, donde en estos días hacen gala de pintadas `anónimas`, que aparecieron en paredes de varios puntos del país, donde bancan a la jefa. Los números que no vienen de ellos marcan otra cosa: según una encuesta de D´Alessio y Berensztein, el 56% de los consultados piensa que CFK debe ir presa, y según la consultora Synopsis el 49% de las personas creen en la veracidad de los cuadernos, contra un 33% que hace lo contrario.

En el círculo de Cristina también hay internas sobre la existencia y el alcance de una `asociación ilícita` alrededor de la obra pública durante el gobierno K. A diferencia de los otros escándalos judiciales que la persiguen, el vuelo que tomó esta causa destapó una pelea que viene desde que La Cámpora empezó a ganar poder en ese entorno: la grieta entre la vieja guardia `santacruceña` y la nueva. `Esta red la armó Néstor con De Vido. Se quedaban con un vuelto para hacer política, pero a Cristina eso nunca le gustó y cuando murió ´el Pingüino´ se peleó con Julio por esto. Las coimas en la obra pública existieron, como existieron siempre, pero CFK no tuvo nunca nada que ver y jamás tocó un peso`, aseguran muy cerca de ella. Aceptar tremen- HAY QUE SOSTENER. Desde La Cámpora organizaron `pintadas anónimas` bancando a la jefa. Casual da confesión, aunque sea con el grabador apagado, es una señal de debilidad: antes de los cuadernos ningún kirchnerista con cierto poder admitía ni un desliz por parte de los líderes. Quizá que hayan aparecido los primeros arrepentidos K en la Justicia -Claudio Uberti, del ministerio de De Vido, y Abal Medina, aunque no la involucró directamente a CFK-, haya tenido algo que ver con la revelación. Según esta lógica, el fallecido ex presidente sería el armador de la red de corrupción, y Cristina una inocente víctima de los pecados de su marido. Lástima que Néstor no está para defenderse.

Al menos Cristina tiene algo para festejar: logró dejar sin quórum la sesión del Senado que debatía el allanamiento a su departamento en Recoleta, R leta y de paso le asestó un golpe a Miguel Pichetto, un enemigo acérrimo. El jefe del bloque del PJ sólo logró llevar ocho de sus veinte senadores al recinto. `El bloque está como lo ven, en un momento difícil`, admiten cerca del estratega peronista. ¿Votarán un futuro desafuero, como pidió Bonadio? `Sólo si hay sentencia firme`.

DIOS LOS CRÍA. En el entorno de Cristina juran que ella no quiere presentarse como candidata el año que viene aunque, si la patria lo demanda, no tendría otra opción. `Prefiere disfrutar de sus nietos, es una señora grande`, aseguran cerca de ella. Sin embargo CFK viene sumando apoyos políticos: el lunes fue a Comodoro Py junto a Juan Grabois, líder social muy cercano al Papa con el que hoy ella tiene diálogo directo, y Eduardo Valdés, ex embajador K en el Vatican Vaticano y gran gestor del acercamiento i to entre ent la ex presidenta y Hugo Moyano. La presencia de los vaticanistas, junto al discurso que dio Cristina el día de la votación de la ley del aborto -donde pidió cuidar a la Iglesia-, sumadas al pésimo momento en la relación del Gobierno con la Santa Sede, alimentan la idea de que el Papa la sigue viendo con buenos ojos.

Además, CFK se volvió a juntar con Ricardo Pignanelli, de SMATA, Gabriel Mariotto, ex vicegobernador de Scioli, Alberto Fernández, ex jefe de Gabinete, Héctor Dáer, de la CGT, Gerardo Zamora, gobernador de Santiago del Estero, Emilio Pérsico, del Evita, y De la Sota. Hay equipo: sólo falta que ella siga en libertad.

Publicado en Noticias el 17/08/2018

Encuesta sobre el cuaderno de las coimas: el 70% cree que “solo algunos” irán a la cárcel

La mayoría de los entrevistados consideró que la plata entregada a exfuncionarios K fueron tanto sobornos como dinero que se destinó a las elecciones.

Una encuesta reveló que casi nadie confía en que la coartada que utilizaron los empresarios en la investigación de Los cuadernos de las coimas sea cierta, pero aún así la mayoría seguirá en libertad. Nombres de peso de la construcción como el primo de Mauricio Macri y ex dueño de la constructora IECSA, Ángelo Calcaterra, y Juan Carlos De Goycochea, de Isolux, le dijeron al juez Claudio Bonadio que la plata que pagaron a exfuncionarios kirchneristas eran para aportes de campaña.

Sin embargo, solo el 5% de los encuestados cree que la participación de los empresarios fue para la campaña electoral kirchnerista. Para la mayoría (47%) tuvo que ver con ambas: aportes y coimas. De ese porcentaje, el 58% de los entrevistados dijo simpatizar con Cambiemos y el 36% con el Frente para la victoria. Hubo un 38% que consideró que la plata era solo de coimas. El dato se desprende de una medición online que la encuestadora de investigación de mercado D’Alessio IROL y la consultora de análisis político Berensztein.

El estudio se hizo en base a una muestra de 823 encuestados mayores de 18 años de todo el país. Otro dato llamativo es que, tras conocerse el escándalo de corrupción que investiga un circuito de cobro de coimas a empresarios del sector energético y la obra pública durante el kirchnerismo, el 52% piensa que el pago de sobornos para construir con el Estado continuará. Por el contrario, solo el 5% cree que desaparecerá.

Desde octubre del 2017 hasta hoy trepó 20 puntos el porcentaje de argentinos que considera que Cristina Kirchner debería ir presa. Así, el 56% de los entrevistados respondió que la expresidenta tendría que ir a la cárcel; contra el 38% que opina lo contrario y un 6% que optó por el “no sabe/no contesta”. El dato contrasta con los de un año atrás, cuando solo el 36% pensaba que debía ir presa.

Por otro lado, el 46% consideró que la exmandataria no fue la organizadora de la red de sobornos durante su gobierno el de Néstor Kirchner: mientras que para el 31% sí y para otro 26% lo fue, pero parcialmente.

También, el 70% de los encuestados pronosticó que solo algunos de los involucrados serán condenados; contra el 19% que sostuvo que no habrá condenas para nadie y el 8% para todos.

La principal prueba con la que cuenta la Justicia sobre la presunta red de sobornos a través del Ministerio de Planificación que manejaba Julio De Vido y que habría empezado bajo las directivas del exprisidente Néstor Kirchner son los cuadernos que escribió Oscar Centeno, exchofer del entonces secretario de Coordinación en Planificación Roberto Baratta.

El chofer registró durante casi diez años los recorridos que hacía a bordo de un auto oficial. En esos trayectos habría trasladado plata proveniente de coimas de empresarios del sector energético y de la obra pública que iban a parar a los bolsillos de funcionarios K. De acuerdo a la investigación a cargo del fiscal Carlos Stornelli, la trama involucraría U$S 160 millones.

Los apuntes se hicieron en cuadernos escolares y registran todos los detalles de los viajes, con menciones de exfuncionarios, contratistas de empresas, dominios de autos y montos de plata.

En los documentos se registran más de 30 domicilios, entre ellos el departamento que Cristina tiene en Recoleta. Era en ese lugar donde se habrían entregado parte de los sobornos a Daniel Muñoz (exsecretario de Néstor Kirchner, que murió en 2016).

Publicado en TN el 13/08/2018

Cristina Kirchner, el eje de todo

Las sorprendentes revelaciones derivadas de los cuadernos de las coimas y el nuevo paso de Cristina Kirchner por los tribunales no son por ahora suficientes como para dar por terminada la hipotética carrera electoral de la exmandataria de cara a los comicios presidenciales de 2019. Sin embargo, contribuyen a consolidar o incluso disminuir su techo electoral.

La última encuesta de D’Alessio Irol-Berensztein, realizada entre 823 personas mayores de 18 años de todo el país, luego de que se hiciera público el contenido de los cuadernos del chofer Oscar Centeno , indica que para el 56% de los encuestados Cristina Kirchner debería ir presa, mientras que el 38% sostiene lo contrario y el 6% no sabe o no contesta.

Esos números, sin embargo, encierran otro dato relevante: entre los votantes del kirchnerista Frente para la Victoria , sólo dos de cada diez personas creen que la expresidenta tendría que ser detenida, en tanto siete de ellas consideran que debe ser absuelta y una dice que no sabe o no responde. Entre los votantes de Cambiemos , en cambio, nueve de cada diez sostienen que Cristina Kirchner debería ir presa.

Según el mismo sondeo, el 47% considera que la expresidenta fue total o parcialmente la organizadora de todo el sistema de corrupción que destaparon los cuadernos de Centeno , en tanto que el 43% juzga que ella no fue quien lo organizó.

En sintonía con los números precedentes, otras consultoras de opinión pública indican que la imagen positiva de Cristina Kirchner habría descendido algo desde que tomó estado público la causa de los cuadernos , pero también señalan que su núcleo duro de votantes se mantiene bastante sólido, en torno del 25%. Se trata de un piso importante como para participar en cualquier contienda electoral, aunque difícilmente suficiente como para pensar en que pueda volver a la Casa Rosada.

Lo cierto es que Cristina Kirchner continúa siendo, y probablemente lo será por bastante tiempo más, el eje de cualquier reacomodamiento dentro del peronismo. Intendentes peronistas de la provincia de Buenos Aires que solo piensan en su propia reelección creen que la candidatura presidencial de Cristina es la que mayor porcentaje de votos traccionaría para ellos, aun cuando no tenga chances de ganar la elección nacional.

Pero del mismo modo hay dirigentes del justicialismo que si hasta hace poco no desechaban la posibilidad de un acuerdo electoral con el kirchnerismo , habida cuenta de que la exjefa del Estado venía subiendo en las encuestas de intención de voto, hoy advierten, con los testimonios sobre coimas que día tras día contribuyen a deshojar el relato cristinista, que esa alianza está dejando de ser conveniente.

Definitivamente, Cristina Kirchner encontrará serias dificultades para crecer más allá de su núcleo duro de seguidores. Pero conserva buenas probabilidades de mantenerlo, en tanto esa cuarta parte del electorado parece seguir comprando su discurso de que es víctima de una persecución política, judicial y mediática, y no se muestra impactado por las revelaciones de los cuadernos del chofer de Roberto Baratta , como anteriormente no se inmutó ante los casi cinco millones de dólares que aparecieron en una caja de seguridad de Florencia Kirchner ni ante los nueve millones que ocultaban los bolsos del exsecretario de Obras Públicas José López.

El problema, entonces, lo sigue teniendo un peronismo que aspira a librarse del lastre kirchnerista, pero advierte que Cristina sigue dividiendo a la oposición y es funcional a las aspiraciones electorales de Mauricio Macri y el oficialismo. Porque, lejos de buscar la proscripción de la expresidenta, como intenta hacer creer el kirchnerismo, el grueso de los dirigentes de Cambiemos celebra cada vez que Cristina sale al ring.

Publicado en La Nación el 14/08/2018