Salarios y retención de talentos: los desafíos de los empresarios argentinos para 2016

Los datos surgen de la encuesta Expectativas de Ejecutivos, realizada por la consultora D’Alessio IROL y presentada en IDEA. Los próximos 12 meses.

Para una mayoría de ejecutivos, la situación económica del país está igual o peor que el semestre pasado; sin embargo, la mirada pesimista comienda a ceder. La consultora D’alessio IROL encuestó a 182 líderes socios de IDEA para conocer las expectativas a futuro del empresariado argentino.

En términos generales, la situación económica fue evaluada mejor que durante el último semestre de 2014. Y las proyecciones a futuro auguran una mirada mucho menos pesimista por parte de quienes dirigen compañías en el país. Para el segundo semestre de este año se espera que la actividad se desarrolle sin sobresaltos y que comience el retorno a la normalidad. A su vez, los empresarios consultados estiman que en 2016 los principales factores que afectan a la empresa se mantendrán estables, con un ligero incremento de las ventas en el mercado interno. Ventas, inversión y empleo tampoco variarán demasiado.

En cuanto a las oportunidades de crecimiento, las claves siguen estando en los aspectos intrínsecos de las empresas. El abaratamiento de costos, la diversificación de productos y servicios y los procesos de reingeniería internos son los principales factores a mejorar según los ejecutivos.

Si bien las expectativas de los empresarios son mejores que las de hace algunos meses, la realidad actual sigue mostrando una actividad desacelerada. Según el informe de D’alessio IROL, una de cada cuatro empresas opera por sobre el 85 por ciento de su capacidad; hace 5 años atrás, esta situación se daba en la mitad de las compañías consultadas. Los empresarios no esperan una recomposición de su rentabilidad en el próximo año, y más aún, la mitad de ellos cree que la misma continuará disminuyendo.

Otro factor que continuará estable es el de la inversión, que se mantendrá en el 10 por ciento sobre las ventas. El objetivo principal serán las inversiones soft o blandas, con el marketing a la cabeza de las políticas a implementar. Para promocionar las inversiones, los ejecutivos señalan tres factores predominantes:la eliminación de impuestos distorsivos, una clarificación de las reglas del juego y una reforma impositiva.

Sobre la competitividad de sus compañías, una mayoría de los empresarios no solo la consideró baja, sino que a su vez la estimaron altamente determinada más por el tipo de cambio que por factores estructurales. Además, en su opinión, la influencia en este aspecto de las características impositivas del mercado local superan a la de factores como la educación y la inversión.

Al momento de establecer los desafíos a futuro, temas como los salarios y la retención de talentos fueron protagonistas. El factor tecnológico también tuvo su importancia en las respuestas de los encuestados. De cara a las elecciones de octubre, los reclamos a los candidatos presidenciales se resumen en cuatro puntos: educación, justicia,  seguridad y política impositiva.

Para los empresarios, la rentabilidad seguirá cayendo con el próximo gobierno

A pesar de ser un poco más optimistas que en 2014, los principales ejecutivos del país piden impuestos menos distorsivos y pro inversión y acceso a crédito a largo plazo
Si bien se muestran un poco más optimistas que en 2014, la mayoría de los hombres de negocios del país no espera un recomposición de la rentabilidad de sus empresas, sino por el contrario, cree que continuará cayendo y lo cual impactará en el empleo y en la capacidad de producción que se viene reduciendo en comparación con otros años.

Además, advierten que el próximo gobierno deberá eliminar impuestos distorsivos para promover las inversiones; generar reglas de juego claras para atraer más capital; implementar una política fiscal pro inversión y ofrecer acceso a financiamiento a largo plazo. También reclaman a la próxima gestión más inversión en energía (electricidad y gas) y en rutas, así como privilegiar una reforma tributaria y educativa para incrementar la competitividad.

Todos estos datos forman parte de una encuesta elaborada el mes pasado por la consultora D’Alessio IROL para IDEA bajo el nombre de Expectativas de Ejecutivos. El relevamiento, hecho de forma online entre 182 de los principales ejecutivos del país, indicó también que el pesimismo que habían evidenciado a fines de 2014 frente a lo que iba a ocurrir este año finalmente no fue tanto. La evaluación del período fue de 8 puntos por encima de lo previsto, según la encuesta, y los ejecutivos esperan un segundo semestre sin mayores sobresaltos. “Hay una ligera mejora de las expectativas, que se encuentran prácticamente en un punto de equilibrio. Y en período electoral, ya finalizando el actual mandato, los empresarios prevén que no habrá mayores sobresaltos” explica el trabajo de D’Alessio.

Durante la presentación de la encuesta también estuvo Dante Sica, titular de la consultora Abeceb.com, quien le dio el marco macro económico y político a los resultados del relevamiento de IDEA. En este sentido, el economista estimó que el poder adquisitivo podría ganar unos puntos y el mercado laboral no volverá a ajustar. Igualmente estimó que la inversión seguirá retrasada; la construcción estancada y el leve repunte de las ventas no beneficia a todos los sectores.

Para Sica, en el último semestre del año se mantendrá la debilidad de la economía, con una inversión debilitada. “Si el Gobierno quiere darle prioridad al objetivo de actividad, va a presionar sobre el frágil equilibrio alcanzado en la primera mitad del año”, aseguró Sica, para quien se deberían flexibilizar las importaciones “para no generar restricciones de oferta. De hecho, en junio se observó una desaceleración, aunque la duda está en si esto va a continuar”. En el caso de las exportaciones, Sica no cree que puedan mejorar, con lo cual el margen para importar será limitado. A esto se suman los altos vencimientos en dólares hasta fin de año y que las reservas cerrarían por debajo de u$s 30.000 millones.

En tanto, en la encuesta de D’Alessio, los empresarios no esperan cambios en la política internacional, ni una recomposición de su rentabilidad en 2016. “La mitad cree que continuará disminuyendo. Esto amplió la brecha de la capacidad disponible, en especial por la retracción de las ventas”. El trabajo asegura que una de cada cuatro empresas está en el 85% de su capacidad cuando hace 5 años, este escenario se daba en la mitad de las compañías.

Del mismo modo, los ejecutivos ven a la competitividad como variable del tipo de cambio y perciben mayoritariamente una mala situación para el país en este aspecto. Al respecto, el estudio de Sica agrega datos preocupantes en cuanto a la evolución del consumo. “Mientras el objetivo consumo demanda seguir con los anuncios sociales, y con ello el déficit seguirá creciendo y eso se financia con emisión monetaria”, advirtió Sica. Es decir, el país volvió al viejo esquema monetario-cambiario que podría profundizarse. “Pero no es sencillo de sostener un esquema de apreciación cambiaria y aceleración de la emisión, frente a un cambio de expectativas”, explicó el titular de Abeceb.com. En definitiva, según Sica, “el primer semestre nos dejó una mejora relativa pero no fue suficiente para impulsar la actividad y se espera que la segunda mitad del año muestre la misma tendencia aunque no está exenta de riesgos”.
Piden debate sobre educación, seguridad y justicia
Frente a la cercanía de las elecciones presidenciales, la lista de temas que los ejecutivos quieren oír debatir a los candidatos la encabeza la educación, seguida por la justicia y la seguridad. Es decir, los mismos que reclama el resto de la sociedad. De todos modos, le suman, en cuarto lugar, el interés por conocer las propuestas relacionadas con la política impositiva.
De manera adicional, ya no les preocupa tanto las definiciones sobre la concertación con los acreedores externos, al igual que la negociación con organismos internacionales. Pero se mantiene la importancia de salarios, retención de talentos y obtención de créditos. Y se incrementa el peso de la tecnología.

Las empresas creen que seguirán perdiendo rentabilidad

Por Pablo Fernández Blanco | LA NACION

Para las principales empresas de la Argentina el presente es mejor de lo que imaginaron en 2014, cuando la crisis cambiaria amenazaba con generar una escasez de dólares que derramara sus efectos negativos sobre la economía. Pero aún está lejos de ser auspicioso, porque la presión de los costos, el atraso cambiario y una demanda que, si bien mejoró, está lejos de ser buena harán que sigan perdiendo rentabilidad en los próximos meses.
Son algunas de las conclusiones que surgen de la Encuesta de Expectativas de Ejecutivos Edición 2015, que se hace todos los años a pedido de IDEA, una de las principales asociaciones empresarias del país, y que se presentó ayer. El trabajo se hizo sobre la base de las respuestas de 185 ejecutivos socios de la entidad, que congrega a compañías como Cargill, Fiat, GM, Banco Galicia, Coca-Cola, Loma Negra, Carrefour y Techint, entre muchas otras.
Un 85% de los encuestados considera que sus ganancias durante los próximos 12 meses no aumentarán, pero más de la mitad espera una evolución negativa: el 40% piensa que disminuirá levemente, mientras que un 12% teme que caerá “significativamente”. “Con respecto a la rentabilidad influyen no sólo el tipo de cambio, sino los salarios, que estuvieron por encima de los precios, y la carga impositiva”, explicó Eduardo D’Alessio, de la consultora D’Alessio Irol, a cargo de la encuesta.
Hay otros elementos para tener en cuenta. Por caso, apenas un 26% de los encuestados sostuvo que utiliza entre un 85 y un 100% de su capacidad instalada, mientras que la mayoría tiene infraestructura ociosa. Con respecto al trabajo anterior, que se hizo en octubre de 2014, trepó de un 29 a un 35% la cantidad de empresas que usan apenas hasta un 70% de sus instalaciones.
Para los próximos 12 meses, un 37% de los consultados cree que sus ventas no se modificarán, un 27% piensa que mejorarán de manera moderada y sólo un 3% espera tener números aun mejores.
Para el economista Dante Sica, de la consultora Abeceb, los malos presagios empresarios no se cumplieron porque Economía cambió el rumbo a fines de 2014. “Las expectativas eran peores en octubre del año pasado, cuando se pensaba que la falta de dólares iba a ocasionar baja de reservas y mayores problemas cambiarios. Pero el Gobierno cambió de política, se endeudó, consolidó reservas y planchó el tipo de cambio”, explicó. Fue el primer puntapié para dar origen a una “sensación de estabilidad”. De todas maneras, remarcó que los indicadores de la economía aún no lograron arrancar. “Tendremos un segundo semestre similar al primero, con una economía mejor, pero tirando al estancamiento”, sostuvo.
En línea con la situación de estancamiento, las empresas destinarán este año alrededor de un 10% de sus ventas a inversión, que se orientará antes a capacitación, comercialización y búsqueda de nuevos mercados que a la compra de bienes de capital o la construcción de nuevas plantas.
La cuestión cambiaria, sin embargo, sigue al tope de sus prioridades, a tal punto que el 40% definió su propia competitividad por la relación entre el peso y el dólar más que por su propia eficiencia. D’Alessio lo explicó en términos concretos: “Cuando se considera que el tipo de cambio está desfasado, tapa al resto de los factores que tienen que ver con la competitividad”, resumió.
La encuesta de expectativas no preguntó sobre las preferencias políticas de los empresarios. Sí, en cambio, sobre qué temas les gustaría que debatieran los candidatos a presidente. Entre los cinco primeros surgieron temas variados: en primer término, la educación, seguida por la situación de la Justicia, la seguridad, la política impositiva y la política cambiaria. En sexto lugar quedó la preocupación por los subsidios y aún más atrás la pelea con los holdouts.
Un sistema cuestionado por el campo
Arranque en 2008
Ese año entró en vigor un sistema de permisos de embarque, conocidos como ROE, para la apertura de exportaciones por cupos
Blanco de críticas
Las entidades del agro objetaron desde un principio ese mecanismo por considerar que afecta la libre competencia entre los operadores y deprime los precios
Sospechas
El manejo de los cupos sin control es otra de las críticas al sistema.

Empresarios: el 41% piensa que la situación empeorará

Encuesta de IDEA sobre expectativas:

Por Alejandro Alfie

Hay una “ligera mejora” de las expectativas de los ejecutivos en la situación económica del país, según una encuesta realizada por la consultora D’Alessio IROL, para IDEA. “Se espera un segundo semestre sin mayores sobresaltos y con retorno a la normalidad”, destacó el informe presentado ayer en la sede del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA).
La expectativa de los ejecutivos, que había caído 15 puntos en 2014, retornó a valores similares a los de años anteriores, ya que el 30% de los encuestados dijo que la situación en el segundo semestre seguirá igual, el 41% que será peor y el 29% que mejorará.
“El segundo semestre del año pasado fue duro y la expectativa era de serias dificultades económicas. Pero esa visión tan negativa no se dio y mejoraron las expectativas”, explicó Eduardo D’Alessio, titular de la consultora D’Alessio IROL.
Consultado por Clarín sobre el aumento en el precio del dólar, el economista Dante Sica, director de la consultora Abeceb, sostuvo que “el tipo de cambio paralelo es la variable que puede hacer más ruido, porque el Gobierno tiene márgenes de maniobra limitados; pero eso no cambia la tendencia, hay expectativas estables para el segundo semestre”.
Pese a ello, el 52% de los ejecutivos consultados prevé una disminución en la rentabilidad de sus empresas en 2016. Para hacer frente a esa situación, la mitad de los ejecutivos bajará la inversión y
el 29% disminuirá el empleo en sus propias empresas.
Sica agregó que la mayoría de los sectores de la economía muestran una desaceleración en la caída y que “el único sector que crece es la construcción”, apalancada por la obra pública, el plan Procrear y los arreglos de la gente en sus casas.
Los ejecutivos consideran prioritario para mejorar la producción que haya mayores inversiones en electricidad, gas y rutas y caminos. Además, les gustaría que los candidatos a presidente de la Nación debatan sobre educación, justicia, seguridad, política impositiva y política cambiaría, en ese orden. .
Los principales reclamos para promover la inversión son la eliminación de impuestos distorsivos, la clarificación de las reglas de juego y otra política fiscal. De hecho, la reforma impositiva es “el principal factor para aumentar la competitividad del país”, plantearon los 182 ejecutivos socios de IDEA que respondieron la encuesta. –
Fuente D’ALESSIO IROL / IDEA

Empresarios esperan segundo semestre “sin sobresaltos”

El sector no espera que una recomposición de la rentabilidad en el 2016.

El sector empresarial espera un segundo semestre “sin sobresaltos” en ventas, inversión y empleo, mientras para el próximo año no prevé una recomposición de su rentabilidad y más de la mitad cree que “continuará disminuyendo”.
Así lo indicó la Encuesta de Expectativas de Ejecutivos 2015, elaborada por el consultor Eduardo D’Alessio y el economista Dante Sica para el Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (Idea).
“El pesimismo mostrado en la medición de fines del 2014 no se vio convalidado en la realidad de este período”, subrayó el sondeo que consultó online a 182 ejecutivos.
Arrojó que “se espera un segundo semestre sin sobresaltos y con retorno a la normalidad”, ya que el 32% estima que será “peor” y un 30% cree que seguirá “igual”.
El estudio indicó que “para el próximo año se prevé estabilidad de los principales factores que afectan a la empresa con un ligero incremento de las ventas en el mercado interno” y remarcó que “los principales factores de mejora siguen siendo los internos a cada compañía”.
“Los empresarios no esperan una recomposición de su rentabilidad en el próximo año. Más aún, la mitad de ellos cree que la misma continuará disminuyendo”, alertó el estudio.
A su vez, señaló que creció “la brecha de la capacidad disponible como consecuencia de la retracción de semestres anteriores en las ventas”.
“Una de cada cuatro empresas opera por sobre el 85% de su capacidad: hace 5 años atrás, esta situación se daba en la mitad de las compañías consultadas”, precisó la encuesta.
Con relación a las inversiones sobre las ventas, el sector empresarial consultado opinó que se mantienen estables en el 10%, luego de que en los últimos años oscilara entre un 10% y 13%.
De cara al futuro, los encuestados indicaron que los tres factores predominantes para promocionar las inversiones son eliminación de impuestos distorsivos, clarificación de las reglas del juego y reforma impositiva. Los empresarios consideraron, por otro lado, que en los principales temas de desafío siguen predominando los salarios y la retención de talentos, mientras creció la importancia del factor tecnológico.
Respecto de la competitividad, el informe señaló que en las empresas esa cuestión “parecería estar más determinada por el tipo de cambio que por factores estructurales”, al tiempo que evaluó: “Se entiende que, en general, es relativamente baja”.
“La competitividad, además, estaría regida por las características impositivas del mercado local”, aclaró el trabajo de Idea.

La mitad de los empresarios cree que ganará menos plata en 2015

23/10/2014
Así se desprende de un estudio presentado en el Coloquio de IDEA. El conflicto con los fondos buitre, una de las deudas pendientes.

El 65 por ciento de los ejecutivos cree que la situación económica empeorará en lo que queda del año. El dato surge de la encuesta de expectativas realizada por D‘Alessio IROL entre 165 ejecutivos y presentada hoy en el marco del 50 Coloquio Anual de IDEA. Otro dato del mismo relevamiento es que un 42% aguarda caída de ventas en los próximos 12 meses, que anticipan impactará a su vez en las perspectivas de inversión.

En promedio, los empresarios sostienen que la renegociación con los acreedores externos es uno de los factores clave a tener en cuenta en la planificación de inversiones para 2015 y sigue encabezando la lista de reclamos la necesidad de encarar una “revisión impositiva”.

Según el sondeo, el 52 por ciento de los consultados estimó que la rentabilidad de su empresa disminuirá en los próximos doce meses, un nivel que se ubicaba en el 41% hace un año..

Para mantener el empleo, un 22% de los consultados sostuvo que sería importante revisar la ley de Abastecimiento, un tema que no había aparecido en el anterior sondeo de junio, ya que la norma aún no había sido aprobada, pero que refleja el rechazo que el tema genera en sectores del empresariado.

Al ser consultados sobre los principales factores para aumentar la competitividad, el 67 por ciento mencionó la “mejora de la educación”, mientras que el 52% apuntó a la reforma impositiva y el 51% el ‘resguardo de la propiedad privada‘.

El sondeo detectó, además, que continúa el desequilibrio entre precios y costos, con una brecha que se amplió a siete puntos comparada con la última medición realizada a mediados de este año.

Rentabilidad. El gráfico, realizado por D’Alessio IROL para IDEA, proyecta los próximos 12 meses.

Si bien la retracción de las ventas muestra una disminución de la capacidad empleada, aún 7 de cada 10 empresas se encuentran operando por encima del 70% de su capacidad.

La mayoría de los consultados cree que el mantenimiento y la generación de empleo requieren trabajo conjunto entre los sectores público y privado, mientras que el sector servicios es el que más pide revisar las condiciones de contratación.

Los temas gremiales, si bien son tenidos en cuenta, están en un segundo plano, y este punto está más presente para la industria.

El 57% de empresas tiene problemas para importar

24/10/2014
Ambito Financiero – Pág. 6

Por: Pablo Jiménez y Diego González

Juan José Aranguren, presidente de Shell, fue ayer uno de los expositores -muy crítico- en el Coloquio. Mar del Plata – “En los últimos años era habitual cruzarse en los pasillos del Coloquio y escuchar que algunos empresarios tenían problemas para importar, pero hoy ya la pregunta no es si tienen inconvenientes, sino cuántos dólares te deben”, reflexionó Luis Secco, el economista que este año hizo el análisis de la tradicional encuesta de expectativas empresarias realizada por D’Alessio IROL para IDEA.Es que según el sondeo, el 57% de las empresas declaró tener problemas para importar insumos clave para el funcionamiento de su empresa y el 49% dijo haber padecido el efecto del cierre de importaciones en los productos finales de sus compañías. Es sin dudas, el impacto de la restricción a las importaciones uno de los puntos centrales en la preocupación de los empresarios.El dato explica que economistas como Orlando Ferreres o el mismo Secco actualizaran sus estimaciones y ya calculen en más de u$s 6.000 millones la deuda del Banco Central con importadores, saldo que se aceleró luego del 30 de julio cuando el juez neoyorquino Thomas Griesa empujó a la Argentina hacia un default parcial. Desde ese momento, la conducción de la autoridad monetaria decidió imponer mayores restricciones para el acceso de dólares principalmente para los importadores y que muchas empresas tuvieran que recurrir al “contado con liqui” (pese a que no hubo ninguna medida formal por parte del Gobierno) para hacer frente a las importaciones.Sorprendió un minúsculo porcentaje (2%) que dijo que el cierre de las importaciones lo favoreció. “Esto se explica porque inclusive algunos importadores se beneficiaron luego de que algunas multinacionales se retiraran del país por los inconvenientes que hay y, pese a no pasar por el mejor momento, de golpe incrementaron su cartera de clientes”, evaluó un importante empresario de servicios a Ámbito.com.ExpectativasLas perspectivas sobre la evolución de la economía para la primera mitad de 2015 son negativas. El 31% de los empresarios consideró que la situación estará mucho peor que en la actualidad y otro 34% observa que será moderadamente peor; si se suman ambos valores resulta que un 65% de los hombres de negocios no ve un escenario positivo para los próximos doce meses.Si bien este porcentaje mermó en relación con la medición del semestre anterior donde el global marcó un 71%, es la primera vez en los últimos años que una perspectiva negativa se mantiene durante dos semestres consecutivos.

El estudio de D’Alessio IROL explica que la inflexión que comenzó a mostrarse a partir de la crisis de la deuda -posdecisión de Griesa-, continúa presente en el segundo semestre y “tiñe” las expectativas para el próximo.En una mirada hacia la última década, ese 31% de perspectiva negativa sobre la economía se iguala a la arrojada durante la crisis de 2009.Ventas y rentabilidadAl desglosarse, la baja de las expectativas generales se ve en las diversas áreas de las empresas, como exportaciones, inversión y empleo, pero donde se grafica más crudamente es en la perspectiva de ventas para el próximo año. El 42% de las compañías creen que venderán menos que este año y otro 40% aspira solamente a mantener las operaciones como en la actualidad. Según Secco, “los empresarios, a diferencia de otros momentos de crisis, no ven al mercado interno como motor de reactivación”.

Otro dato que muestra que ya no es el consumo interno el vaso de agua en el desierto, es que las estrategias están puestas en mejorar los factores internos, especialmente los costos y procesos.Relacionado al punto anterior, otro dato relevante es que pese a que la expectativa de inversión viene declinando, muchos de los pesos sobrantes por el impedimento a repatriar dividendos y la falta de acceso a compra de divisas, casi por obligación, van directamente a la inversión en nuevas tecnologías y la adquisición de servicios.Además, los empresarios esperan una caída en la rentabilidad de sus negocios. Para el 52% de los consultados disminuirá y sólo un 20% cree que mejorará. El dato cobra relevancia teniendo en cuenta que en un año un 11% más de empresarios empeoró sus perspectivas sobre la rentabilidad.Teniendo en cuenta estos números, un factor central es cómo recuperar la competitividad del país. A diferencia de otros años, cuando el tema central era la reforma impositiva, este año ven a la mejora en la educación (67%) como el gran motor de cambio. Otro dato relevante relacionado con la competitividad es el pedido de resguardo a la propiedad privada que aumentó en los últimos tres meses del 20% al 51% y la necesidad de un acuerdo con organismos internacionales de crédito que se elevó del 14% al 46%. Según Secco, en estas respuestas repercutió la negociación con los buitres y las sanciones de la Ley de Abastecimiento y del nuevo Código Civil.

* Enviados especiales

La vanguardia estratégica ya no depende de una sola persona

La supervivencia de las Pyme: La mitad del padrón societario del Instituto de Desarrollo Económico Argentino son Pyme, más interesadas en acceder a herramientas de gestión y competitividad, que en codearse con la flor y nata del establishment. Es importante implementar un proceso de delegación y profesionalización de los recursos.:
Por Rubén Chorny
Al hacer el balance del reciente 5to. Encuentro Anual de IDEA Pyme que este año le tocara presidir, el nuevo socio director de BDO, Sergio Crivelli, rescata no solo la cantidad de dueños y gerentes de pequeñas y medianas empresas que asistieron, sino el volumen de atención que dispensaron al programa diseñado sobre la base de brindar herramientas y capacitación para negociación y estrategias comerciales que abarcó toda una jornada.
Reconoce que al elaborar la agenda se detuvieron más en las necesidades del sector más numeroso de la economía privada, a la sazón la mitad del padrón societario del Instituto de Desarrollo Empresario Argentino (IDEA).
En las expectativas Pyme captadas en la primera mitad del año por la encuesta que aportara a la entidad Eduardo D´Alessio, al momento de organizarse el encuentro, aparecía claramente la perspectiva de ventas estables pero con menos ganancias durante todo el año, sobre todo en el interior.
En ese contexto, Crivelli señala que se armó un programa para sintonizar los temas a incluir con las necesidades de las firmas de estas características, que en la encuesta habían manifestado preocupación por la influencia que tienen en su desarrollo las decisiones gubernamentales, especialmente la presión impositiva y las tarifas, así como por el salario y la retención de talentos.
El ejecutivo hace hincapié en este perfil de servicios al empresario que distingue a IDEA Pyme dentro de una entidad que afirma no haber percibido nunca como un espacio reservado solo a grandes corporaciones.
“El hecho de que hoy las Pyme despierten el interés de muchas asociaciones empresariales, de bancos y proveedores de servicios lo asocio más al desarrollo que ha tenido el sector en los últimos años”, aclara.
–¿Qué conclusiones sacó de su experiencia como presidente del Encuentro Anual de IDEA Pyme?
–En lo personal fue una excelente experiencia haber trabajado con un equipo de profesionales de distintas firmas que brindaron su tiempo en forma desinteresada aportando su experiencia en la prestación de servicios a empresas. Ello nos permitió armar un programa de excelente nivel capaz de mantener el interés del auditorio durante un día completo. Viéndolo desde el lado de las Pyme, considero que el Encuentro Anual es una excelente oportunidad para que los dueños o gerentes de estas empresas puedan acceder al conocimiento y a las herramientas de las grandes empresas que pueden ser utilizadas por las Pyme.

–¿Cómo ha sido en el empresariado y en el Gobierno la repercusión de este encuentro?
–Evidentemente, hemos logrado despertar el interés del empresariado. Esto queda en evidencia ante el creciente número de asistentes al evento durante los cinco años transcurridos desde que IDEA Pyme comenzó con esta actividad. Los comentarios recibidos a través de la encuesta de satisfacción son muy reconfortantes.
El gran desafío para quienes tenemos la responsabilidad de armar la propuesta es lograr sintonía entre los temas a incluir en el programa y las necesidades de las empresas participantes. En este sentido, la evaluación ha sido muy positiva tanto en lo que se refiere a contenidos como también respecto de cómo fueron abordados por los expositores.
Sinceramente, desconozco si hubo alguna repercusión en el Gobierno. El encuentro no apunta a tratar temas de la política o la economía sino a brindar capacitación a los empresarios. Si bien hemos contado con analistas de ambas áreas, el único propósito de estos paneles es poner en contexto a las empresas a la hora de pensar en su futuro.

–¿Cómo sirve en la práctica esta propuesta de IDEA-Pyme a los empresarios?
–Nuestro objetivo es que el empresario Pyme pueda tomarse un día para pensar cómo mejorar su empresa escuchando las experiencias de otros empresarios y a profesionales de distintas áreas que vuelcan su conocimiento y dan ejemplos de cómo es posible en una Pyme trabajar en ciertos aspectos en igualdad de condiciones que las grandes empresas.
Es importante que no se queden solo con las inquietudes que se les puedan generar a partir del encuentro, sino que se animen a implementar acciones concretas en sus empresas. Para esto IDEA Pyme organiza talleres y desayunos de trabajo a lo largo del año, con el objetivo de dar un apoyo continuo al empresario que quiera poner en práctica algunas de las cosas que le resultaron de interés en el encuentro.

–¿Qué estrategia piensan para instalar en el universo Pyme las culturas del management o marketing, así como principios de competitividad, innovación o profesionalización?
–El primer paso es que el empresario tome conciencia de que para crecer va a necesitar mejorar el management como herramienta fundamental para innovar en forma permanente. Para esto es importante implementar un proceso de delegación y profesionalización de sus recursos.
En este encuentro hemos visto testimonios de ex números uno de grandes empresas multinacionales que se incorporaron a empresas Pyme, logrando una complementación perfecta entre ambas culturas y pudiendo tomar lo mejor de ambas. Hoy en día la forma de hacer negocios cambia de manera vertiginosa y es imposible mantenerse a la vanguardia en temas estratégicos dependiendo de una sola persona, característica de este tipo de empresas.

Poderes públicos
–¿Tendrá algún rol que jugar la relación con los poderes públicos, con el Gobierno?
–El rol principal de IDEA es lograr el desarrollo empresarial como motor del desarrollo del país. Las personas que nos acercamos a este espacio con ánimo de contribuir a este objetivo no lo hacemos con fines políticos. En el caso específico de IDEA Pyme, somos un grupo de personas de distintas empresas socias de IDEA que trabajamos en forma de­sin­teresada aportando nuestra experiencia en distintas áreas.
Cuando pensamos en el armado del programa del encuentro o de las distintas actividades que realizamos durante el año, no estamos pensando en darle una orientación política o económica determinada. Solo pensamos en hacer algo útil para las empresas. De hecho, dentro de cada grupo que trabaja en IDEA existen visiones muy distintas sobre las políticas implementadas por el Gobierno de turno.

–¿Podría significar un replanteo de la tradicional IDEA esta inclusión del mundo Pyme?
–Casi la mitad de las empresas que son socias de IDEA son Pyme. Empecé a participar en la entidad hace tres años y nunca tuve la percepción de que IDEA fuera un espacio reservado solo a grandes corporaciones. El hecho de que hoy las Pyme despierten el interés de muchas asociaciones empresariales, de bancos y proveedores de servicios lo asocio más al desarrollo que ha tenido el sector en los últimos años.
En los períodos en que las Pyme desaparecían o solo podían luchar para subsistir no podían pensar en capacitarse en nuevas herramientas para crecer. Hoy existe un universo de empresas pequeñas o medianas que han crecido rápidamente, con buenos niveles de rentabilidad y, quizás, en forma algo desordenada. En los últimos dos años los niveles de crecimiento y rentabilidad se redujeron y los empresarios sienten la necesidad de ser más eficientes y contar con mejores herramientas para adaptarse a los cambios. Allí es donde IDEA Pyme ofrece un espacio para ayudarlos y desarrollarse.

Eduardo D’Alessio en Infobae TV

Entrevista a Eduardo D’Alessio en Infobae TV. El presidente de D’Alessio IROL realiza un análisis del 49º Coloquio Anual de IDEA, celebrado en la ciudad de Mar del Plata.

Click en la imagen para ver el video

18 de octubre de 2013

“Las PyMES son más optimistas que las grandes empresas”

El titular de D’Alessio IROL, Eduardo D’Alessio, compartió los detalles de la encuesta realizada entre los 300 hombres de negocios más poderosos del país en el Coloquio de IDEA en Mar del Plata.

 

En contacto con Agenda PyME, D’Alessio describió la comparación entre los dos sectores que participaron del relevamiento y dijo que “las PyMES y las grandes empresas son dos pasajeros que van en distintos camarotes del mismo barco, tienen problemáticas muy parecidas, pero las primeras son más optimistas porque siempre tienen la esperanza de poder arreglárselas y ser los suficientemente hábiles para poder sortear los problemas”.

Además, el consultor señaló un eje conflictivo que atraviesa a todas las pequeñas y medianas empresas: “Pagan impuestos por ganancias ficticias, al no haber ajuste por inflación, se paga por algo que realmente no es utilidad, sumado a que cada vez es mayor el premio a la evasión y por lo tanto cada vez es mayor el premio a la competencia desleal”.

En comunicación con Nino Fernández y Gabriela Ensinck, el titular de D’alessio IROL se refirió a la proyección empresaria general para los próximos dos años y aseguró que “existe una cauta expectativa, suponen que las cosas van a estar más o menos igual”.

Puede escucharse la entrevista completa acá: http://www.notasdeactualidad.com.ar/las-pymes-son-mas-optimistas-que-las-grandes-empresas/