Día del Amigo austero: ¿pizza, picada o empanadas?

Más pizza, menos asado. Regalos por hasta $300. A pesar del bolsillo ajustado, hay decisión de festejar el Día del Amigo con lo que se pueda. Las promociones ayudan, claro, pero lo que importa es juntarse.

El 44% de los argentinos elegirá pizza en la celebración de la amistad, asegura un estudio de la consultora Focus Market que relevó 6849 casos en todo el país. Luego, sigue la picada (36%) y en tercer lugar, un clásico argentino: el asado (14%). Un 3% eligió pastas y otro 3%, empandas.

En 2018, la historia era distinta. Reinaba la picada con el 57% de los encuestados que la elegían. Seguía la pizza, con un 28%, y luego el asado, con un 11%.

La decisión de abandonar la picada coincide con los hábitos de consumo relevados por otra consultora, D’Alessio IROL. Según la firma, un 62% de los argentinos dice haber reducido su consumo de fiambre.

Los precios por kilo de los fiambres se dispararon con la inflación y en 2019, según relevó el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos en junio, se podía conseguir queso pategrás por $542,49 y salame por $477,73.

A la pregunta “¿Cuánto pensás gastar en el Día del Amigo?”, realizada en el estudio de Focus Market, un 27% asegura que no planea regalar nada. Un 23% dice que gastará hasta $500 y otro 23%, hasta $300.

Finalmente, en los canales de comunicación para enviar saludos durante la celebración triunfa el WhatsApp en el 75% de los casos. Un 10% elegirá el teléfono y un 8%, Facebook.

Consejos para ahorrar en el Día del Amigo

  • Planear importa. La demanda en los restaurantes y bares va a ser alta el sábado por la noche y, para evitar rebotar en la puerta y tener que irse a otro lugar con otro presupuesto, es mejor reservar donde cada grupo se sienta cómodo.
  • Hacer cuentas. La pizza es más barata que las empandas. Suponiendo que hay un grupo de cuatro amigos y que cada persona come cuatro porciones o cuatro empanadas, y sobre la base de un relevamiento de cadenas “premium”, la pizza costaría unos $140 por persona contra las empanadas que saldrían unos $200 por persona.
  • Atención a los descuentos. Las grandes cadenas de supermercados están haciendo promociones en snacks y cervezas durante el fin de semana. Hay promociones del 70% en la segunda unidad (es decir, 35% de descuento en cada producto) y de 3×2 (un 33% menos en cada bien).
  • Apostar por el celular. La competencia en las apps de delivery está alta y algunas ya anunciaron que van a tener promociones ese día para captar más clientes. Tal vez sea una mejor opción que pedir por teléfono.

 

Publicado por La Nación el 20/07/2019

Elecciones 2019 | La valoración de los políticos en Córdoba y en Buenos Aires

El Gobierno sigue convenciendo a 6 de cada 10 votantes de Macri en el balotaje de 2015, pero no logra romper las barreras del segmento opositor, donde casi la totalidad (94%) desaprueba lo realizado hasta el momento. En la columna anterior, analizamos los matices que existen dentro de la opinión pública acerca de la visión de la situación económica del país, concentrándonos en las provincias de Buenos Aires y Córdoba, que en conjunto representan casi el 46% del electorado nacional. Allí se destacaban el optimismo de los cordobeses en contraposición con la mirada más pesimista de los encuestados que residían en la provincia de Buenos Aires. Pero estas miradas contrapuestas también están presentes en otros indicadores, por ejemplo, en la valoración de la imagen del gobierno nacional y en la de los principales candidatos que se medirán en las PASO en apenas tres semanas.

Según los datos del último Monitor de humor social y político que realizamos mensualmente junto a D´Alessio- Irol, la gestión del gobierno del presidente Macri, luego de haber alcanzado su valoración más baja en el mes de abril, mantiene los valores de mayo: el 32% apoya la gestión de Cambiemos, en tanto que el 66% la desaprueba. El gobierno sigue convenciendo a 6 de cada 10 votantes de Macri en el balotaje de 2015, pero no logra romper las barreras del segmento opositor, donde casi la totalidad (94%) desaprueba lo realizado hasta el momento. (Datos correspondientes a la medición realizada en forma online durante junio de 2019 a 1038 encuestados, mayores de 18 años, de todo el país).

Los valores son levemente más críticos si analizamos las respuestas de los consultados residentes en la provincia de Buenos Aires: 29% opina que la gestión del gobierno nacional es buena, contra el 68% que la evalúa negativamente. Y al igual que los valores obtenidos para el total nacional, el balance de gestión siempre fue negativo, es decir que el porcentaje de los que la consideraban mala era superior a los que la consideraban buena. (Datos pertenecientes a la medición de junio realizada en forma online a 361 encuestados, mayores de 18 años, con residencia en la provincia de Buenos Aires). Sin embargo, la brecha entre la valoración positiva y la negativa se acerca si los encuestados son cordobeses : el 44% aprueba la gestión nacional contra el 54% que la desaprueba. Estos valores siguen estando lejos de aquellos correspondientes a marzo de 2018, cuando eran más los cordobeses que apoyaban la gestión de Macri, 58%, que los que la cuestionaban, 40%. (Datos perteneciente a la medición de junio realizada en forma online a 325 encuestados, mayores de 18 años, con residencia en la provincia de Córdoba).

Al analizar la imagen del presidente Mauricio Macri, algo similar ocurre según lugar de residencia de los encuestados: la mirada es más positiva si viven en la provincia de Córdoba en tanto que se negativiza en el resto de las demás provincias relevadas. Así, para un mayoritario 56% a nivel nacional, la imagen de Macri es mala, contra un 39% que lo valora positivamente. Estos valores se acentúan en la provincia de Buenos Aires, donde la imagen negativa del presidente es del 59% y la positiva, del 37%, manteniendo el balance negativo de imagen desde marzo de 2018. En cambio, la valoración positiva de los cordobeses hacia el presidente siempre fue mayoritaria, a excepción del mes de abril pasado cuando registró su valor más bajo desde marzo de 2018: 41%. Desde este pico más bajo, la imagen del presidente, al igual que la valoración de su gestión, está en alza ya que creció 13 puntos porcentuales, alcanzando en esta medición una imagen positiva del 54% (el mejor registro desde hace un año) y una negativa de 40% (descendiendo 12 puntos desde abril).

En columnas anteriores, analizamos el ranking de imagen positiva a nivel nacional, donde la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, mantiene su liderazgo con el 48%, y sigue siendo la única figura con balance positivo de imagen, es decir cuya imagen positiva es mayor a la negativa. Es seguida por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich y el actual jefe de gobierno de la CABA, Horacio Rodríguez Larreta, ambos con 42% y ascendiendo dos puntos porcentuales respecto de la última medición. A sólo un punto aparecen los candidatos a gobernador por la provincia de Buenos Aires y a presidente por el Frente de Todos, Axel Kicillof y Alberto Fernández, los más valorados del arco opositor. Sigue con 39% el presidente Macri y a un punto, con 38%, el precandidato a senador nacional por la CABA de Juntos por el Cambio, Martín Lousteau, comparte idéntico porcentaje con el candidato a presidente de Consenso Federal, Roberto Lavagna, que también asciende dos puntos este mes. Más atrás, aparece la expresidenta Cristina Fernández, quien en junio recupera dos puntos y obtiene 37% de imagen positiva y 59% de negativa, valores que la aceran al récord de hace dos meses atrás
Pero ¿cómo valoran los cordobeses y los bonaerenses a los principales referentes de los frentes que se presentarán en 11 de agosto en las PASO? ¿Se mantienen las posiciones del ranking a nivel nacional?
En general, la mirada de los bonaerenses se asemeja a la del promedio a nivel nacional, aunque la valoración positiva es levemente superior en el caso de los principales candidatos del Frente de Todos. Pero si se trata de la provincia de Córdoba, los funcionarios del gobierno nacional y los principales candidatos de la coalición Juntos por el Cambio no solo son valorados positivamente, sino que los porcentajes de imagen positiva se elevan significativamente por sobre el promedio del total país.

Así, la gobernadora de la provincia de Buenos Aires continúa siendo la política nacional con la imagen positiva más alta (desde enero de 2018), pasando de 48% a nivel nacional al 63% en la evaluación de junio para La Docta. Pero, a diferencia del ranking nacional, el segundo lugar es para el presidente Macri, con 54% y el tercero, para Rodríguez Larreta, con 53%. Esta tendencia alcanza a la evaluación que hacen los cordobeses del candidato por el Frente Despertar, José Luis Espert: para el 32% tiene una imagen positiva, contra el 24% que obtiene a nivel nacional. En cuanto a los candidatos de Consenso Federal, también en la provincia de Córdoba se observa una mirada más benigna, aunque no tan marcada como la observada para los candidatos de Juntos por el Cambio: Juan Manuel Urtubey y Margarita Stolbizer miden 4 y 3 puntos porcentuales por encima del promedio nacional, con excepción del candidato a presidente, Roberto Lavagna, cuya imagen positiva se encuentra tres puntos porcentuales por debajo de dicho promedio.

Sin embargo, la mirada se endurece cuando los cordobeses tienen que evaluar a los candidatos del Frente de Todos y las opiniones positivas se derrumban si las comparamos con las obtenidas para el resto de las provincias: Alberto Fernández es el más valorado con el 26% de las menciones, seguido por Axel Kicillof y Pino Solanas, ambos con 23%. Recordemos que a nivel nacional medían 41%, 41% y 34%, respectivamente. En cuando a la imagen positiva de la candidata a la vicepresidencia por el Frente de Todos, Cristina Fernández de Kirchner, vuelve a caer dos puntos desde la medición anterior, pasando del 21% al 19%, cuando a nivel nacional mide 37%. Esto se explica por el antikirchnerismo cordobés, que se origina básicamente en el impacto de la crisis del campo por las retenciones múltiples a las exportaciones y en los intentos desde el gobierno kirchnerista de condicionar al gobierno provincial retaceándoles los fondos que le correspondían, como castigo porque el peronismo cordobés no se alineaba completamente al kirchnerismo. Este sentimiento alcanza a cualquier fuerza o candidato que se oponga al kirchnerismo, en su momento fue Cambiemos, con Macri.

Es por esto, que en las últimas semanas la campaña parece concentrarse en la provincia de Córdoba: por un lado, Macri con su renovado Juntos Por el Cambio intentará que se repita el porcentaje alcanzado en el balotaje en esta provincia, cercano al 72, que le permitió quedarse con la presidencia de la Nación en 2015. Por el otro, el candidato del Frente de Todos tiene como objetivo seducir a los desencantados de la gestión del gobierno de Macri, mostrándose más moderado y conciliador y, sobre todo, diferente de su candidata a vicepresidenta, enfatizando que su espacio abarca mucho más que al kirchnerismo. Deberemos esperar el gran ensayo general del 11 de agosto, que permitirá evaluar fortalezas y debilidades de las respectivas opciones.

 

Publicado por TN el 22/07/2019.

La publicidad electoral impacta en los más jóvenes

La televisión continúa siendo la principal fuente de consumo de pauta política, pero las redes sociales ocupan un lugar predominante entre los jóvenes como medio de información sobre los candidatos.

El domingo 7 de julio se comenzaron a emitir los anuncios de la campaña electoral de cara a las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). Según un estudio realizado para la Asociación Argentina de Publicidad por las consultoras D´Alessio Irol y Berensztein, la propaganda política presenta una tendencia a generar desagrado y hastío en la población en general, pero encuentra un nuevo público interesado entre los centennials.

En cuanto al atractivo de las publicidades electorales, existe una división entre un desagrado generalizado y aceptación pero solo de algunas piezas. Como sensación, predomina el hastío, con un 38%, siendo más notorio en los mayores de 40 años, seguido por el agotamiento (18%).

Los atributos negativos superan a los positivos, resaltando la falta de credibilidad y cercanía, la distorsión de la realidad y la ausencia de propuestas claras. Dos tercios de los encuestados consideran que los candidatos solo hacen promesas en busca de votos y casi la mitad cree que está alejada de los intereses de los ciudadanos.

Si bien se resalta un mayor escepticismo entre hombres y mayores de 40 años, se percibe una visión favorable entre la Generación Z.

La claridad del mensaje es el elemento más destacado, aunque en baja medida, seguido por la creatividad y la relevancia de la información. En este aspecto, nuevamente es el grupo más joven el que realiza mayores valoraciones, y la tendencia demuestra que a mayor edad, mayor rechazo.

En lo que respecta a la grieta, se hace presente determinando la atracción o el rechazo de las publicidades electorales, y sobre todo en la recordación y valoración de las mismas.

Medios de difusión e impacto

El informe elaborado por la AAP tiene un apartado dedicado a los medios con los que se informa la población, teniendo en cuenta que este año se destinó un 20% de los espacios de campaña a medios digitales. Sin embargo, la televisión continúa siendo la principal fuente de consumo de propaganda política.

La televisión y los diarios online son los más consumidos. La primera tiene un impacto mayor en el segmento adulto de la sociedad, mientras que los medios digitales sobresalen entre millennials, y se percibe una gran importancia de las redes sociales, especialmente entre millennials y centennials.

La mitad de los encuestados califica a la publicidad electoral como “muy invasiva”. A la inversa, millennials y centennials son más tolerantes y receptivos.

Si bien este año el espacio destinado para los partidos políticos se redujo en un 50% en lo que respecta a la emisión diaria, no se percibe una visión predominante con respecto a la notoriedad de esta modificación.

En relación a la regulación de la pauta electoral, mientras que 6 de cada 10 coinciden en el pedido por una menor duración y espacio, con mayor intensidad entre mayores de 25 años, el grupo de menor edad evidencia conformidad con la normativa actual.

Finalmente, al momento de definir el voto, 9 de cada 10 mencionan no haber sido influenciado por la publicidad política en su decisión, sin embargo, un tercio de los centennials indica que fue de utilidad. Además, el 77% de los encuestados aseguró no sentirse representado.

Informe completo: Análisis publicidad electoral – Julio 2019

Ficha técnica:

Muestra: 582 casos

Universo: Población mayor de 18 a 70 años, ambos géneros, de niveles medios.

Plaza: Nacional

Fecha: Julio 2019

Según encuesta, crece la imagen positiva del Presidente Macri y de su gestión de gobierno

De acuerdo con el último monitoreo de D´Alessio Irol y Berensztein, esto se debe a la tranquilidad cambiaria de los últimos meses

Por segundo mes consecutivo, la imagen y la evaluación positiva del Presidente Mauricio Macri están en ascenso.

Según el último monitoreo de D´Alessio Irol y Berensztein, esto se debe en gran medida a las mejoras obtenidas en las expectativas económicas logradas por la tranquilidad cambiaria de los últimos meses.

El 32% de los consultados evalúa positivamente su administración, mientras que el 66% la reprueba.

Si se tiene en cuenta las edades, las críticas hacia la gestión de Macri disminuyen entre los mayores de 55 años, con el 51%, mientras que entre los más jóvenes ascienden al 82%.

En esta medición, la imagen positiva del Presidente Macri pasó de 37% a 39%, registrando el valor más alto desde septiembre del año pasado, y su imagen negativa se mantuvo en 56%.

Estos números lo colocan dos puntos por delante de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, pero también dos puntos debajo de su principal adversario, Alberto Fernández.

En el caso de la senadora, en junio recuperó dos puntos y obtuvo 37% de imagen positiva y 59% de negativa.

En cuanto a María Eugenia Vidal, si bien la imagen positiva de la gobernadora de la provincia de Buenos Aires bajó tres puntos en comparación a la medición anterior, por lo que pasó de 51% a 48%, sigue al frente del ranking y es la única figura del oficialismo cuya imagen positiva es mayor a la negativa.

Al hacer un paneo de la imagen y posicionamiento de los principales candidatos,  Vidal está al frente con 48%, seguidos por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich y el jefe de gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, con 42% cada uno.

Por detrás está Axel Kicillof y Alberto Fernández, con 41%. Le sigue el presidente Macri con 39% y Martín Lousteau, con 38%, quien tiene el mismo porcentaje que Roberto Lavagna. Al final está la expresidenta Cristina Fernández, con 37%.

Estos datos corresponden a la medición de junio realizada en forma online a 1.038 encuestados, mayores de 18 años, de todo el país.

 

Publicado por iProfesional el 15/07/19.

El que ahorra en el banco quiere dejar de sentirse un perdedor

Imaginen la peor decisión de ahorro que se pueda hacer. De acuerdo, así planteado las respuestas pueden ser muchas. Desde prender puchos con billetes o sumarse esperanzado a un esquema piramidal, por decir un par. Pero pongamos que la pregunta va orientada a las inversiones tradicionales, las que cualquier ahorrista promedio puede hacer y entender, sin buscar inventar la pólvora o intentar volverse Gordon Gekko de la noche a la mañana gracias a un curso online.

El youtuber financiero Ramiro Marra supo quizás resumirlo a través de las pintadas callejeras con las que se promociona o como eslogan de sus charlas públicas: `Si invertís en plazo fijo sos un boludo`.

El Banco Central supo darle la razón en algunas de sus publicaciones. No literalmente, claro, el lenguaje fue diferente. Pero, a nivel más conceptual, podríamos decir que si.

Fue en 2016, en tiempos también ya pasados en los que Federico Sturzenegger intentaba -sin éxito- frenar la inflación. En ese momento, la entidad publicó datos sobre el resultado histórico de ahorrar en plazo fijo, dólares y ladrillos.

No es que los argentinos ahorren solo en eso, según datos de D´Alessio Irol a marzo del año pasado algo menos del 60% de los argentinos con capacidad de ahorro atesoraba dólares, 45% colocaba ahorros a plazo fijo y 10% invertía en propiedades (este número competía con 13% en fondos comunes, 10% en bonos y 9% ciones). Pero el ejercicio no es mío.

Los númerosdel BCRA mostraban que el ahorrista que puso el equivalente a $ 100 en plazo fijo en 1980, y mantuvo esa inversión renovándola por 36 años, hubiera encontrado en 2016 el equivalente a $ 1,40 de aquél capital inicial. Esto es, luego de descontar la inflación, más de dos décadas de tasa hubieran permitido comprar lo mismo que 36 años antes se conseguía con $ 1,40.

Las otras dos alternativas rendían mejor en el ejercicio del Central. Pero tampoco tanto.

Si el ahorrista ochentoso en cuestión hubiera, en cambio, cambiado los mismo $ 100 por dólares en lugar de colocarlos a plazo en el banco, en 2016 la capacidad adquisitiva de ese ahorro hubiera caído al equivalente de $ 77 de 1980.

No es un gran resultado, de hecho esa colocación se desvalorizó, pero no vamos a negar acá que es mucho mejor que el plazo fijo. De hecho, 55 veces mejor, para ser exactos.

El ladrillo (difícil comprar algo con $ 100 en este mercado, en 1980 y hoy también, pero sigamos la lógica), en cambio, tuvo un -levísimo- rendimiento positivo. El ahorrista del siglo pasado tenía hace dos años el equivalente a $ 128 gracias a esa añeja inversión.

La explicación de esta pérdida en el poder adquisitivo no está en los saltos del dólar en las últimas tres décadas y fracción (si fuera así, atesorar divisas hubiera sido un negoción). Está, en realidad, en que las tasas que pagaron históricamente los plazos fijos estuvieron por debajo de lo que subieron los precios. Por debajo de la inflación. Lo que los economistas llaman `tasas reales positivas`. Con datos menos antiguos que los del BCRA que el economista Federico Muñoz le cedió a este diario, llegan hasta 2013, podemos ver lo raro que es lo contrario. Lo raro que es encontrar `tasas reales positivas`, es decir, que rindan más de lo que daña al valor de los ahorros la inflación.

La tasa real positiva es una obsesión de los economistas, en especial los halcones anti inflación. Dicen que, sostenidas en el tiempo, pueden hacer que un país tenga una moneda estable. Pero no estamos hablando de eso acá.

En los últimos 198 meses, dado que alrededor del 80% de los depósitos a plazo se colocan a menos de 44 días tomo como unidad el mes, la tasa promedio de plazos fijos le ganó a la inflación sólo en 40 ocasiones. La llegada de Cambiemos al poder no cambió tanto eso: de 43 meses, los plazos fijos sólo ganaron en 14 oportunidades.

La novedad desde que en octubre del año pasado el BCRA y el FMI adoptaron un duro esquema de agregados monetarios -al que no vamos a evaluar acá- 7 de 9 meses la tasa promedio de plazo fijo le ganó a la inflación.

Poco comparado con, por ejemplo, Brasil, donde las tasas perdieron contra los precios brevemente en 2013. Y nunca más (la caderneta de poupan^a, un depósito de ahorro popular, garantiza tasas reales positivas a los brasileños).

Pero con suerte los primeros pasos para que el que invierta en plazo fijo pueda, quizás no fanfarronear el trade perfecto, pero al menos no sentirse un boludo.. Desde 2003, la tasa promedio de plazo Jijo le ganó 40 veces a la inflación, de un total de 198 meses Atesorar dólares entre 1980 y 2016 rindió más que el plazo fijo, pero menos que la inflación del período.

 

Publicado por El Cronista el 16/07/19.

Más consumidores eligen las segundas marcas

Los clientes abandonan los productos líderes de cada categoría y se vuelcan hacia otras opciones más económicas. 14/07/2019 11:16 Los cambios en el consumo, producto de la caída de la actividad económica impactaron en todas las clases sociales. Frente a este panorama, los clientes abandonan los productos líderes de cada categoría y optan por segundas y terceras marcas.

La crisis económica está generando importantes modificaciones en los hábitos de consumo, entre las que se destaca el abandono de las “primeras marcas” hacia otras opciones más económicas, e incluso en ocasiones se llega al “abandono de la categoría”, es decir, suspender la compra de determinada línea de productos. Este fenómeno se verifica en mayor medida en rubros como indumentaria, juguetes, electrónica y muebles, pero también afecta al consumo masivo, que se compone de productos vinculados al uso cotidiano.

Según un estudio realizado por la consultora D’Alessio Irol y Berensztein, “9 de cada 10 hogares de clase media reemplazaron a las primeras marcas por otras alternativas de menor precio”.

Respecto a este fenómeno, Carlos María Beigbeder, presidente de la Cámara de Comercio de Posadas, indicó a PRIMERA EDICIÓN que ésta “es una cuestión netamente monetaria. A la gente no le alcanza el dinero y entonces termina buscando segundas marcas, en muchos casos no llenan más el carrito del supermercado sino que hacen compras diarias. Van cambiando la forma de gastar su dinero, lo dosifica mucho más. No hace una compra general, sino va haciendo compras más cortitas para poder ir distribuyendo el dinero de otra manera”.

A su vez, también destacó que “lo último que se deja de consumir es lo que uno come, pero así y todo hay un montón de gastos e inclusive lo que se lleva a la boca ha sido reemplazado. Antes todos los domingos se hacía asado, ahora un domingo sí y un domingo no, o se hace fideos, o pastas. Van achicando esa clase de consumo que son superfluos”.

Con el objetivo de suprimir lo que pueda generar mayor impacto en el presupuesto, las gaseosas son el primer producto en ser desplazado. Los consumidores consideran que pueden suplir lo que resulta más costoso por productos de estación. De este modo, la categoría gaseosa es la que más se descartó; un 71% ya no consume esta bebida como antes. El cambio de hábito se dio en todos los niveles sociales, más fuerte en las clases más bajas y aunque la clase media resiste al cambio, un 71% ya las reemplazó.
“Aquella familia que tomaba una gaseosa de primera marca, hoy lo hace con menos frecuencia y también eligen en muchos casos una segunda marca. Aquella que tomaba una gaseosa de segunda marca, hoy toma agua”, destacó Beigbeder.

Siguiendo esta línea, las categorías de alimentos que más cayeron están encabezadas por la carne: un 72% dejó de consumirla. Las carnes estarían siendo suplantadas por arroz (41%), fideos (40%), y pollo (36%). De este modo, las personas optan por consumir mayor cantidad de verduras (35%) y frutas (31%).
Frente a este panorama, las familias están armando una nueva planificación de sus gastos donde los “extras” están quedando afuera. Es así como fueron descartando el apoyo escolar para los chicos (48%), las actividades extracurriculares (33%), salidas al cine o teatro (32%), gimnasios (30%), comidas fuera de casa (30%) y viajes o vacaciones (28%).

“Una familia tipo que necesita más de 30 mil pesos para comprar o para mantenerse dentro de la canasta básica, en esa línea, busca ahorrar también en los costos. Primero deja algunas cuestiones superfluas y después empieza a buscar otras cosas”, destacó el presidente de la CCIP.

Con la caída de la demanda, antes de que el público abandone el hábito de consumo, las propias empresas líderes impulsan marcas más económicas. Respecto a esto, Beigbeder comentó que “las primeras marcas, las más tradicionales están pasando por una situación económica complicada, justamente por eso. Porque no le alcanza a la gente y entonces empieza a consumir segundas marcas, que es lo que viene ocurriendo en todo el país, no sólo en Misiones”, y agregó: “Hay muchas empresas que tienen segundas marcas y eso invita a poder abarcar ese segmento de consumidores que no pueden comprar primeras marcas. En algunos casos se nota la diferencia, pero en muchos otros es bastante similar la primera a la segunda marca”.

“ Está mutando el consumo porque no puede sostenerse como tal, en la medida en que lo veníamos haciendo. Hoy llenar un carrito de supermercado si lo haces una vez o dos veces a la semana son 2 mil o 3 mil pesos y hay gente que no puede destinar ese dinero. En muchos casos van a comprar a los mayoristas. Esa es una herramienta que se está utilizando mucho, en esos casos no es demasiado el ahorro, pero la gente tiene la idea de que comprar en el mayorista es mucho más barato, y en muchos casos no es así. En realidad no es tan barato”, concluyó.

 

Publicado por Primer Edición (Misiones) el 14/07/19.

El 52% de los argentinos piensa que la economía estará mejor dentro de un año

El último Monitor del Humor Social de D”Alessio IROL indica que continúa la tendencia positiva a futuro sobre las expectativas económicas. De acuerdo a los resultados, el 52% cree que la economía del país estará mejor dentro de un año, contra el 38% que opina que estará peor, valores que se acercan a los previos a las legislativas de 2017.

Este optimismo es sostenido principalmente por electores de Cambiemos, ya que el 71% considera que estará mucho mejor o mejor el año entrante, contra el 32% de aquellos que votaron a Scioli en el balotaje en 2015. Aún en el grupo de electores de la oposición se observa una merma en la visión negativa hacia al futuro económico de la Argentina, quizás debido a la esperanza que sientan por un cambio de gobierno con cual se sientan más identificados, pasando del 57% al 55% en esta medición, alcanzando su nivel más bajo desde octubre de 2017.A pesar de la estabilidad del dólar y la calma de los mercados, la realidad es que la situación económica sigue siendo angustiante para la enorme mayoría de los argentinos: el 78% opina que la situación económica del país está peor en comparación con el año pasado, contra el 20% que expresa lo contrario.

Nuevamente se observa una diferencia de percepciones según el lado de la grieta en que se encuentra el consultado: para el 35% de los electores de Macri en el balotaje en 2015 la situación está mejor que hace un año (cuando esa cifra llegaba a 15% hace apenas dos meses), mientras que esta visión alcanza a sólo un 4% de los votantes opositores.Una vez más la obsesión por la inflación y la incertidumbre sobre el rumbo económico se encuentran entre los principales problemas que desvelan a los argentinos: para el 94% de los consultados la inflación lidera el podio, seguida por la falta de certeza respecto del rumbo de la economía del país, con el 72%, aunque parecieran tener mayor peso entre los opositores (98% y 83%) que entre los partidarios de Cambiemos (90% y 61%, respectivamente).

En tercer lugar, aparece los temas vinculados a la inseguridad y delincuencia con el 59%, preocupación que crece al 69% entre oficialistas.

En cuarto lugar, con 42%, las menciones a no ver propuestas realizables para mejorar el crecimiento económico, seguida por el persistente reclamo por la corrupción del gobierno anterior, con alrededor del 40%, pero que asciende a 6 de cada 10 partidarios de Cambiemos.

Le siguen la dificultad para pagar tarjetas y créditos, con 39%, que sigan dando subsidios a quienes no lo merecen, con el 36%, y el temor a perder el trabajo, con idéntico porcentaje.Sin embargo, la dificultad para afrontar el pago de tarjetas y créditos se da con mayor énfasis entre los opositores (54%), así como el temor a perder la fuente de ingresos (55%), en cambio, la entrega indiscriminada de subsidios es un reclamo sostenido por el 57% de los electores oficialistas.

Sigue la inquietud acerca de la posible corrupción del actual gobierno, con el 34%, preocupación que alcanza al 46% de los opositores.

Finalmente aparecen quién resultará vencedor en octubre, con el 31% y la falta de control de los piquetes, con 26%, inquietudes que tienen mayor peso entre oficialistas: 46% (contra 15% entre opositores) y 45% (contra 5% entre opositores), respectivamente.La preocupación por la inflación atraviesa de manera similar a todos los encuestados por igual, sin distinción por tramo etario.

Sin embargo, las diferencias aparecen en torno la inseguridad y a cuestiones de tinte político, como la corrupción del gobierno kirchnerista, la entrega indiscriminada de subsidios y la falta de control de los piquetes y cortes, que se afectarían más a los mayores de 55 años.

También se observan distinciones respecto de las dificultades para afrontar los pagos de créditos y tarjetas, del temor a perder el trabajo, que afectarían más a los segmentos de hasta 55 años.Por último, la falta de crédito para comprar una vivienda preocupa más a los menores de 35 años.Pese a que los altos niveles de inflación y la incertidumbre sobre la economía siguen estando al tope de las preocupaciones, en la visión más optimista influyó la menor volatilidad que registró el mercado cambiario en los últimos días, sumada a una leve recuperación del consumo, producto de los planes de estímulo lanzados por la Casa Rosada, tales como Precios Cuidados y Esenciales, más la extensión de los programas Ahora 3, 6, 12 y 18 cuotas.

En efecto, el pago en cuotas es una práctica común de los argentinos: tres de cada cuatro consultados se encuentra actualmente realizando ese tipo de operaciones, ya sea por tarjeta de crédito (55%), préstamos bancarios (16%) o de algún otro tipo (3%).

Además, 3 de cada 10 admiten que comprarán indumentaria, calzado y marroquinería con estos planes en cuotas fomentados por el Gobierno Nacional y un 21% que los destinarán al turismo.
Aunque los que apoyan a la administración macrista, se muestren más propensos a su uso: un 39% de ellos aseguró que comprará indumentaria en cuotas o un 30% que los destinará al turismo, contra sólo 18% y el 9%, respectivamente, del votante Frente para la Victoria en el balotaje de 2015, según TN.El fortalecimiento del peso en la Argentina, en un contexto en el cual el dólar se aprecia a nivel internacional, alimenta en los mercados la sensación de estabilidad relativa de nuestra moneda.

Hace poco más de una semana el periódico británico Financial Times publicó un artículo titulado “Los inversores se entusiasman con las señales de la Argentina”, en el que se destaca el surgimiento de un escenario más prometedor para el país.

Por el momento parecen haber quedado atrás las jornadas en las cuales los inversores se desprendían masivamente de los activos argentinos ¿Parará la contienda electoral con la misma apacibilidad? Es la principal incertidumbre.

Los balanceos propios de la contienda electoral tienen la potencialidad de provocar nuevas mareas, estas podrían afectar la calma relativa.

Volviendo al ámbito doméstico, la mejora de los salarios y el provecho de los planes electoralistas (en el pasado vituperados por los socios de Cambiemos cuando eran utilizados por el FPV como instrumento para ganar elecciones) renuevan el humor social, lo que a su vez promueve una mayor ilusión en la campaña del oficialismo. La euforia es tal que el propio Jaime Durán Barba afirmó que se puede ganar en primera vuelta. ¿Exageración, realidad o mera estrategia de campaña?.

Continúa el optimismo: el 52% piensa que la economía del país estará mejor dentro de un año

El dato sobresaliente del último Monitor del Humor Social que elaboramos mensualmente junto a D”Alessio IROL es que continúa la tendencia, evidenciada en el mes anterior, hacia una vuelta del optimismo, donde las expectativas económicas a futuro volvieron a ser favorables y mayoritarias: el 52% cree que la economía del país estará mejor dentro de un año, contra el 38% que opina que estará peor, valores que se acercan a los previos a las legislativas de 2017. Este optimismo es sostenido principalmente por electores de Cambiemos, ya que el 71% considera que estará mucho mejor o mejor el año entrante, contra el 32% de aquellos que votaron a Scioli en el balotaje en 2015. (Datos correspondientes a la medición de junio realizada en forma online a 1.038 encuestados, mayores de 18 años, de todo el país).

Aún en el grupo de electores de la oposición se observa una merma en la visión negativa hacia al futuro económico de la Argentina, quizás debido a la esperanza que sientan por un cambio de gobierno con cual se sientan más identificados, pasando del 57% al 55% en esta medición, alcanzando su nivel más bajo desde octubre de 2017.

A pesar de la estabilidad del dólar y la calma de los mercados, la realidad es que la situación económica sigue siendo angustiante para la enorme mayoría de los argentinos: el 78% opina que la situación económica del país está peor en comparación con el año pasado, contra el 20% que expresa lo contrario. Nuevamente se observa una diferencia de percepciones según el lado de la grieta en que se encuentra el consultado: para el 35% de los electores de Macri en el balotaje en 2015 la situación está mejor que hace un año (cuando esa cifra llegaba a 15% hace apenas dos meses), mientras que esta visión alcanza a sólo un 4% de los votantes opositores.

Una vez más la obsesión por la inflación y la incertidumbre sobre el rumbo económico se encuentran entre los principales problemas que desvelan a los argentinos: para el 94% de los consultados la inflación lidera el podio, seguida por la falta de certeza respecto del rumbo de la economía del país, con el 72%, aunque parecieran tener mayor peso entre los opositores (98% y 83%) que entre los partidarios de Cambiemos (90% y 61%, respectivamente). En tercer lugar, aparece los temas vinculados a la inseguridad y delincuencia con el 59%, preocupación que crece al 69% entre oficialistas. En cuarto lugar, con 42%, las menciones a no ver propuestas realizables para mejorar el crecimiento económico, seguida por el persistente reclamo por la corrupción del gobierno anterior, con alrededor del 40%, pero que asciende a 6 de cada 10 partidarios de Cambiemos. Le siguen la dificultad para pagar tarjetas y créditos, con 39%, que sigan dando subsidios a quienes no lo merecen, con el 36%, y el temor a perder el trabajo, con idéntico porcentaje.

Sin embargo, la dificultad para afrontar el pago de tarjetas y créditos se da con mayor énfasis entre los opositores (54%), así como el temor a perder la fuente de ingresos (55%), en cambio, la entrega indiscriminada de subsidios es un reclamo sostenido por el 57% de los electores oficialistas. Sigue la inquietud acerca de la posible corrupción del actual gobierno, con el 34%, preocupación que alcanza al 46% de los opositores. Finalmente aparecen quién resultará vencedor en octubre, con el 31% y la falta de control de los piquetes, con 26%, inquietudes que tienen mayor peso entre oficialistas: 46% (contra 15% entre opositores) y 45% (contra 5% entre opositores), respectivamente.

La preocupación por la inflación atraviesa de manera similar a todos los encuestados por igual, sin distinción por tramo etario. Sin embargo, las diferencias aparecen en torno la inseguridad y a cuestiones de tinte político, como la corrupción del gobierno kirchnerista, la entrega indiscriminada de subsidios y la falta de control de los piquetes y cortes, que se afectarían más a los mayores de 55 años. También se observan distinciones respecto de las dificultades para afrontar los pagos de créditos y tarjetas, del temor a perder el trabajo, que afectarían más a los segmentos de hasta 55 años.Por último, la falta de crédito para comprar una vivienda preocupa más a los menores de 35 años.

Pese a que los altos niveles de inflación y la incertidumbre sobre la economía siguen estando al tope de las preocupaciones, en la visión más optimista influyó la menor volatilidad que registró el mercado cambiario en los últimos días, sumada a una leve recuperación del consumo, producto de los planes de estímulo lanzados por la Casa Rosada, tales como Precios Cuidados y Esenciales, más la extensión de los programas Ahora 3, 6, 12 y 18 cuotas. En efecto, el pago en cuotas es una práctica común de los argentinos: tres de cada cuatro consultados se encuentra actualmente realizando ese tipo de operaciones, ya sea por tarjeta de crédito (55%), préstamos bancarios (16%) o de algún otro tipo (3%).

Además, 3 de cada 10 admiten que comprarán indumentaria, calzado y marroquinería con estos planes en cuotas fomentados por el Gobierno Nacional y un 21% que los destinarán al turismo.Aunque los que apoyan a la administración macrista, se muestren más propensos a su uso: un 39% de ellos aseguró que comprará indumentaria en cuotas o un 30% que los destinará al turismo, contra sólo 18% y el 9%, respectivamente, del votante Frente para la Victoria en el balotaje de 2015.

Publicado por TN el 14/07/19.

Nueva encuesta habla de tres tercios: macrismo, peronismo e “independientes”

Según un nuevo estudio de D’Alessio Irol y Berensztein, “6 de cada 10 argentinos consideran que las PASO no son útiles, Fernández y Macri aparecen como las únicas figuras políticas capaces de mejorar la situación económica. Además, 3 de cada 10 votantes se identificarían con el sector de Juntos por el Cambio (Cambiemos), 2 de cada 10 son kirchneristas y hay otro 11% que es peronista. “El tercio restante estaría compuesto por aquellos independientes y descreídos de la política”.

Según un nuevo estudio de D’Alessio Irol y Berensztein, “6 de cada 10 argentinos consideran que las PASO no son útiles ni necesarias como instancia previa, incrementándose a 8 de cada 10 entre votantes de Cambiemos”. Con respecto al cierre de listas, casi la mitad de los ciudadanos considera que hubo más “traiciones” y sorpresas que en otros años. Esta tendencia se acentúa entre votantes de Cambiemos.

Además, la mayoría de los consultados sostuvo que está conforme con los candidatos electorales, pero un 21% hubiese preferido que María Eugenia Vidal sea candidata, y otro 21% dijo lo mismo pero sobre Cristina Fernández de Kirchner.

Además, “7 de cada 10 votantes del FPV hubieran preferido que no se postulara Macri, en tanto que 6 de cada 10 votantes del oficialismo hubieran preferido que no lo hiciera Fernández”. Alejandro Biondini, que se postula como candidato presidencial por el Frente Patriótico, encabeza la lista de candidatos “rechazados”, el más nombrado ante la pregunta “¿hay alguno que hubiera preferido que no se postulara?”.

“La fórmula Fernández – Fernández con Cristina como vice aparece como hecho más significativo previo al cierre de listas, seguido de cerca por la fórmula Macri – Pichetto. El regreso de Massa al frente de Cristina se posiciona en tercer lugar”, dice también.

Las perspectivas económicas a corto plazo, hay mucha incertidumbre, pero los votantes de Cambiemos creen que van a estar mejor en octubre. “La inflación aparece como la principal problemática a resolver por el próximo gobierno, seguido por otras temáticas de índole económica como la pobreza y la desocupación, siendo más marcado entre votantes kirchneristas. Luego, se encuentra la preocupación por la inseguridad, en especial en el electorado de Cambiemos”.

3 de cada 10 votantes se identificarían con el sector de Juntos por el Cambio (Cambiemos), 2 de cada 10 son kierneristas y hay otro 11% que es peronista. “El tercio restante estaría compuesto por aquellos independientes y descreídos de la política”.

Por otro lado, la mayoría de los votantes tiene decidido su voto, pero hay todavía un 15% que no sabe a quién votar. Además, casi la mitad de los argentinos (47%) cree que Mauricio Macri será el próximo presidente, mientras que el 42% cree que será Alberto Fernández.

“Fernández y Macri aparecen como las únicas figuras políticas capaces de mejorar la situación económica”, dice el informe, que especifica que prácticamente no se sacan diferencias. “Prácticamente, la mitad del electorado piensa que tanto la fórmula Macri – Pichetto como Fernández – Fernández harán un buen gobierno en caso de ganar, evidenciando la grieta existente”.

Ficha técnica: Datos correspondientes a la medición realizada en forma online entre el 24 y 25 de junio de 2019. Se incluyeron las respuestas de 827 encuestados, mayores de 18 años, de todo el país.

 

Publicado por Urgente24 el 12/07/19.

¿Tenés deudas con tu tarjeta? Enteráte qué podés hacer

Según un sondeo de D’Alessio Irol dado a conocer en junio, el 77% de la clase media está endeudada y el 38% destina el 40% de sus ingresos familiares para cancelarla. Los consejos de ADECUA.

Un 58% de los argentinos tiene deudas con la tarjeta de crédito, un 12% con tarjeta no bancarias, un 31% en préstamos bancarios, un 8% le debe a una concesionaria de autos o terminal, un 7% a cadenas de comercio, un 6% a otras entidades financieras y un 6% tiene deudas con el supermercado, según un sondeo realizado por la consultora D’Alessio Irol.

“A lo largo de un año una deuda de 20.000 pasan a ser entre 50.000 y 60.000, según la tarjeta y el banco emisor”, señaló Pablo Wende en Buen Miércoles.

Sólo 4 de cada 10 argentinos que están endeudados pagando cuotas, destinan menos del 20% a esas deudas. Un 38% destina el 40% de sus ingresos familiares a pagar deudas. La mitad espera poder saldar sus deudas antes de fin de año, pero la otra mitad asegura que necesita por lo menos tres años más para cumplir el sueño de no tener deudas.

“Las cuotas son un arma de doble filo”, sentenció Wende.

El año pasado, el 47% estaba conforme con los préstamos que había pedido, hoy la misma valoración bajó a la mitad; apenas el 24% no reniega. Los tres aspectos principales que tienen en cuenta a la hora de tomar un crédito para un auto o vivienda es el nivel de inflación (42%), el monto final con intereses (35%) y poder pagar la cuota (32%).

Por su parte, el abogado de ADECUA, Osvaldo Riopedre, denuncia el acoso de los acreedores.

 

Publicado por Telefé Noticias el 10/07/19.